Según un estudio de consumidores realizado por Ledvance, uno de cada dos consumidores en Europa desconoce esta prohibición y que el 67% ignora cuáles son sus consecuencias.
Europa dice adiós a las lámparas halógenas a partir del 1 de septiembre
En un primer momento, la normativa afectará principalmente a los fabricantes de lámparas y distribuidores. La nueva Directiva ErP se aplica exclusivamente a la fabricación y “colocación de los productos en el mercado” en todo el territorio de la Unión Europea. Esto significa, que, aunque las lámparas no están fabricadas en la Unión Europea, tampoco se podrán importar lámparas que hayan sido fabricadas después del 31 de agosto de 2018, con lo cual el stock almacenado de lámparas halógenas con luz no direccional caerá a partir del 1 de septiembre de 2018, de manera continuada, hasta que se agoten todas las lámparas almacenadas.
Sin embargo, un estudio de consumidores realizado por Ledvance revela que uno de cada dos consumidores en Europa desconoce esta prohibición y que el 67% ignora cuáles son sus consecuencias. De hecho, hasta un tercio de los encuestados todavía incluye en sus listas de compra viejas tecnologías de iluminación como lámparas halógenas (29%) o incandescentes (27%).
Resulta llamativo que el grado de conocimiento de la prohibición de las lámparas halógenas está relacionado con la edad, la educación y los ingresos. Así, los resultados del estudio internacional muestran que en Europa el 54% de los encuestados nunca había oído hablar del inminente “adiós a las bombillas halógenas”. Si sumamos la cantidad de personas que escucharon algo al respecto pero que desconocían sus consecuencias, esa cifra aumenta en 13 puntos porcentuales al 67%. El 62% de los que no conocían la”prohibición” están en el grupo de edad de 50 a 60 años. Y el 57% que no había oído hablar de la próxima etapa de la prohibición, consideraba que su conocimiento sobre sistemas de iluminación era bueno o al menos adecuado. Por el contrario, la conciencia sobre el tema en el grupo de edad de 18 a 39 años y entre aquellas personas con altos ingresos y altos niveles de educación es particularmente alta.
Cuáles son las lámparas que desaparecerán del mercado
No podrán ser comercializadas a partir del 1 de septiembre las “lámparas clásicas” halógenas que emiten una luz omnidireccional, como, por ejemplo, las típicas lámparas estándar, adorno y vela. La mayoría de estas lámparas tienen el casquillo comúnmente utilizado E27 o E14 y proporcionan una iluminación genérica.
Qué halógenas no se verán afectadas por la prohibición
Los artículos que quedarán excluidos de la regulación corresponden a productos de uso especial, como lámparas de horno que no pueden ser reemplazadas con tecnologías alternativas que ahorren energía. Otros productos a los cuales no aplica la regulación son ciertos tipos de lámparas halógenas con casquillo R7s, como la Osram Haloline, o G9 como la Osram Halopin, fabricadas por Ledvance.
El LED como reemplazo
El adiós a las lámparas halógenas significa que, a partir del próximo otoño, los profesionales deben replantearse sus compras y optar por el gran número de alternativas LED que hay disponibles en el mercado.