Presentada una nueva tecnología para medir el alumbrado urbano
Snelloptics, una spin off surgida del Centro de Desarrollo de Sensores, Instrumentación y Sistemas (CD6) de la Universitat Politècnica de Catalunya • BarcelonaTech (UPC), ha desarrollado un dispositivo fotométrico móvil capaz de medir in situ, y de manera ágil, la cantidad y la calidad de luz aportada en la vía pública por todas las fuentes lumínicas y, además, su origen y su distribución. El dispositivo se denomina Polux y en su desarrollo han intervenido las empresas Ilimit, Aido y Fibercom. El proyecto se ha realizado en el marco del programa nacional Innpacto y se exhibió en el Smart Cities Expo World Congress.
A partir del mes de marzo de 2013 el sistema Polux ya funcionará a pleno rendimiento en ciudades, vías urbanas e interurbanas y autopistas. Es un dispositivo fotométrico móvil para iluminación viaria capaz de medir la iluminación de una escena completa en cualquier ciudad o vía de comunicación. El sistema proporciona información objetiva sobre la cantidad y la calidad de la luz y sobre el desempeño de las normativas de alumbrado y contaminación lumínica vigentes.
Polux se presentó el pasado 12 de noviembre a un grupo de empresas líderes que tendrían posteriormente presencia en el Smart Cities Expo World Congress y con las cuales la UPC mantiene una estrecha colaboración, como por ejemplo Abertis, Aqualogy, Siemens, Atos, Shneider, Indra, Urbiotica, IBM, Telefónica, Indra, Ros Roca y Endesa. El sistema permitirá en los ayuntamientos y las administraciones tomar decisiones en relación al consumo de alumbrado urbano en función de datos objetivos generados por este nuevo sistema.
Según el Instituto Catalán de Energía, la factura de la luz de una ciudad de 200.000 habitantes roza de media los 3,5 millones euros anuales. Polux hará posible que las ciudades puedan regular el alumbrado urbano en función del momento, del espacio y del uso. De hecho, las instalaciones nuevas de alumbrado público aportan un 20% de consumo más de luz de la que se necesita. Para una ciudad mediana, esto supone un coste aproximado de unos 400.000 euros anuales.
Para Josep Arasa, uno de los investigadores que ha participado en la creación de Polux, “el objetivo del proyecto era disponer de una herramienta objetiva que ayudara a conocer qué cantidad y calidad de luz estamos empleando en nuestras ciudades”. Hasta ahora, “se controlaba muy bien la componente eléctrica, pero la luz, en sí misma, continuaba siendo intangible, y nosotros hemos sido capaces de hacerla tangible”, explica Arasa.
Cómo funciona Polux
Polux consta de un sensor fotométrico direccional individual capaz de operar en la calle, verificar y validar la tecnología de medida y comprobar que la evaluación se realiza de acuerdo con la normativa vigente. El dispositivo lleva un cabezal de lectura formado por un conjunto de sensores individuales que cubren la escena iluminada a medir y que están sincronizados.
Además, dispone de un sistema de georeferencia. Todo el mecanismo se aloja en un vehículo (puede ser un turismo convencional o un autobús urbano), con un sistema especial de sujeción. Polux recoge los datos obtenidos del cabezal de lectura y los almacena temporalmente para traspasarlos después a una unidad de gestión y de visualización. Finalmente, esta información se procesa para poder elaborar los informes preceptivos.
Polux será especialmente útil para evaluar la iluminación de instalaciones en grandes vías interurbanas, autovías, autopistas y túneles en España, puesto que está diseñado según las normativas estatales de iluminación, una de las más exigentes de Europa. Por lo tanto, el sistema será muy útil para las administraciones públicas, empresas concesionarias de autopistas y empresas encargadas del mantenimiento de infraestructuras de comunicaciones. De hecho, según la Dirección General de Tráfico, una correcta iluminación de las vías puede llegar a reducir un 30% los accidentes.