Omega es sinónimo de una alta cadencia de embalaje. El poder de esta máquina reside en su capacidad para crear un embalaje seguro y estable. La construcción de la Omega es muy sólida y está pensada para contar con muy poco mantenimiento.
Máximo rendimiento para el embalaje
La elección de Omega para un final de línea es sinónimo de calidad y velocidad. Desde la pantalla, el operario puede controlar todo tipo de parámetros, creando ciclos de trabajo totalmente personalizados. El rendimiento de la Omega se ve incrementado con la instalación de la doble bobina opcional, con el que aumenta la capacidad de embalaje.
Además, Omega puede montar, de forma opcional: