Un nuevo embalaje para pizza preparada ofrece importantes ahorros a los retailers
Uno de los principales problemas con los que se encuentran los retailers a la hora de vender pizza ya preparada está en el embalaje porque las cajas que la contienen normalmente presentan manchas que empeoran el aspecto del producto, suelen montarse de forma manual convencional y dificultan y ralentizan la distribución desde el proveedor al almacén central y de éste a la tienda.
Smurfit Kappa ha querido solucionar estos problemas al retail desarrollando un innovador embalaje que optimiza la cadena de suministro, ya que es rápido de montar, mejora en un 50% la distribución, maximiza la operativa en el retail e incluye un tratamiento superficial antigrasa que garantiza el contacto con alimentos, mejorando así la imagen en el punto de venta.
Asimismo, esta nueva solución para pizza preparada respeta la colocación de los agujeros de ventilación y utiliza un 6% menos de superficie de cartón para su elaboración, lo que implica poder transportar un 50% más de embalajes por pallet y 25 camiones menos al año, tomando como ejemplo una cantidad de 2 millones de unidades anuales. Esto supone importantes ahorros logísticos y un menor coste de distribución y material, mejorando el tiempo de trabajo en la reposición, paletizado, etc. En cifras, este ahorro supera los 70.000 euros: más de 40.000 euros en el propio embalaje, más de 3.000 en la paletización y casi 27.000 en la logística.
Unos ahorros que también llegan a la sostenibilidad, ya que esta caja de pizza ayuda a los retailers a reducir su huella de carbono en 48 Toneladas de CO2 al año, el equivalente a cargar casi 6 millones de smartphones.