Tapones de plástico, fundamentales para los nuevos hábitos de consumo
La demanda de refrescos azucarados, gaseosas y zumos apenas crece. En cambio, las ventas de agua embotellada han vuelto a aumentar desde que comenzó la pandemia, probablemente por razones de higiene. Todos estos hábitos de consumo tienen sus consecuencias en los procesos de producción y en las innovaciones de los fabricantes de máquinas y de materias primas plásticas. Lo veremos en Equiplast (Barcelona, 30 de mayo a 2 de junio de 2023), donde los proveedores de inyectoras, por ejemplo, mostrarán sus avances en máquinas más rápidas, con mayores espacios entre columnas para moldes de más cavidades o donde los productores de plásticos hablarán con los transformadores sobre la enorme oferta de diversos materiales para los muy diferentes tipos de tapones.
El de los tapones y cierres es un sector clave para garantizar el éxito de un envase.
La manifiesta tendencia hacia un estilo de vida más sano se refleja claramente en el aumento de la necesidad de envases de plástico para alimentos. En consecuencia, también crece la demanda de distintos tipos de cierres de plástico, es decir, tapones de rosca, tapas abatibles, cierres de disco, dosificadores, sprays, tapas y tapones. Se prevé que las ventas de los diferentes tipos de cierres de plástico -en términos de unidades- aumentarán en torno a un 2,9% anual hasta 2032.
Los cierres de mayor calidad ganan cuota de mercado
Inmersos en la carrera hacia una industria de los plásticos más circular, los transformadores de plásticos buscan la fabricación de tapones con cada vez con menos material. En 2022, los simples tapones de rosca seguían representando alrededor de dos tercios del mercado mundial de cierres de plástico. Sin embargo, estudios de mercado como el realizado recientemente por Ceresana registran una tendencia hacia los cierres más elaborados, sobre todo para productos premium como perfumes o productos farmacéuticos. Los fabricantes y vendedores de envases para productos cosméticos y farmacéuticos se benefician de la evolución social. En los países en desarrollo cada vez más mujeres trabajan fuera de casa, la atención sanitaria empieza a mejorar en los países más pobres y, en las regiones ya industrializadas, el cambio demográfico provoca un aumento del consumo de medicamentos. El crecimiento de los productos precocinados y para llevar está aumentando la demanda de envases resellables, especialmente en el sector alimentario.
Más polipropileno y polietileno que PET
Cada vez se fabrican más bolsas de pie prácticas y ligeras para líquidos, sustancias viscosas, cremas y otras aplicaciones, con un tipo de cierre integrado que se puede abrir y cerrar durante la vida útil del producto contenido. Debido al menor tamaño de estos cierres, los fabricantes deben cumplir requisitos diferentes para estos envases flexibles que para los cierres de rosca tradicionales. Las diferentes exigencias y diseños de los tipos de cierre repercuten en la elección de los plásticos utilizados en cada caso, si bien los más habituales son el polipropileno (PP), polietileno (HDPE y LDPE), tereftalato de polietileno (PET) y poliestireno (PS).