El nuevo Ecobulk MX 560 amplía la gama de productos de Schütz
Los diferentes requisitos de la cadena de suministro exigen flexibilidad y un variado surtido de soluciones de embalaje que se adapte a los deseos de los clientes. Con el fin de satisfacer estas exigencias, Schütz incorpora a su amplia gama de productos el nuevo Ecobulk MX 560. Este IBC posee una forma muy aplanada y un volumen nominal de 560 litros. De este modo, el nuevo contenedor resulta inmejorable para aplicaciones en las que sea conveniente usar envases más pequeños pero, al mismo tiempo, se dé importancia al máximo rendimiento y la más alta calidad. Y es que el MX 560 combina a la vez una capacidad óptima y una altura del contenedor reducida, con un conjunto inferior de eficacia probada en múltiples ocasiones. Este se corresponde con el de los tipos de MX de 820, 1 000 y 1 250 litros de capacidad. Por consiguiente, todos estos modelos de la línea MX con compatibles.
El desarrollo del nuevo contenedor, que toma como base esta gama de éxito con unas dimensiones de 1 200 x 1 000 milímetros, permite un manejo especialmente flexible. De este modo, las instalaciones y máquinas que el cliente ya tiene configuradas para estas medidas también se pueden emplear con el MX 560. Un aspecto económico a su favor en la expedición por vía marítima: estas dimensiones de palet garantizan un aprovechamiento ideal del espacio de almacenamiento y de transporte en contenedores normalizados de gran capacidad, también en cargamentos mixtos junto con las variantes de IBC MX más grandes. Con un apilamiento continuo a tres alturas de este modelo.
El Ecobulk MX 560 combina a la vez una capacidad óptima y una altura del contenedor reducida, con un conjunto inferior de eficacia probada. Foto: Schütz.
Un peso ligero con ventajas económicas
Los envases de dimensiones compactas se prefieren, por ejemplo, en el sector agrícola y agroquímico. En Norteamérica, en particular, los IBCs con una menor capacidad se usan para el empleo específico de fitosanitarios concentrados o desinfectantes de semillas de alto valor. El usuario también da prioridad a la sencilla manipulación del envase durante su uso y su almacenamiento. En este aspecto, el Ecobulk MX 560 convence completamente: gracias a su reducida tara, es fácil de manejar en el uso diario, ya se encuentre lleno o vacío –sobre todo en comparación con contenedores de acero inoxidable o bidones de acero o de plástico–. Con su reducida capacidad sobre una superficie óptima, el nuevo IBC de Schütz permite una inmovilización de capital limitada y un acortamiento de los tiempos de parada cuando la rotación del producto es baja. De este modo, también se evita el peligro de que el producto se vuelva inservible por envejecimiento. En caso necesario, se puede equipar el IBC con una barrera adicional de EVOH antipermeación. Al actuar como una capa de barrera en la bombona interior del IBC, asegura la calidad del producto, protege al producto envasado de alteraciones y al entorno de impactos medioambientales, ya que impide la entrada y salida de oxígeno, nitrógeno y otros gases.
La solución de envasado compacta permite una configuración individual para las aplicaciones más diversas: el nuevo Ecobulk MX 560. Foto: Schütz.
Acabados opcionales abren un amplio campo de aplicación
Con otras opciones de equipamiento adicionales, a este compacto IBC se le abren algunos ámbitos de aplicación añadidos – por ejemplo, en el modelo Foodcert –. La pertinente certificación de sistemas conforme a la norma industrial FSSC 22000 garantiza la conformidad con los exigentes requisitos del ámbito alimentario en cuestión de materiales, procesos y productos. Para mercancías altamente sensibles del sector no alimentario, en las que la seguridad y la limpieza técnica son esenciales, Schütz también produce el Ecobulk MX 560 en la variante Cleancert.
Una protección EX mediante toma de tierra, tanto en la válvula de vaciado como en el palet, y una bombona interior con equipamiento antiestático hacen que, si se desea, el IBC sea apto para su uso en entornos de trabajo con riesgo de explosión de las zonas 1 y 2 y para el transporte de fluidos con punto de inflamación ≤ 60° C. Los componentes que se pueden elegir opcionalmente incluyen además una válvula de retención en la grifería de salida. La denominada check valve impide que el producto envasado refluya al contenedor – una función que se suele emplear precisamente en el ámbito de los fitosanitarios –. Para una óptima aireación y desaireación durante el transporte, el almacenamiento y el vaciado, se ofrece un sistema de respiradero consistente en tapón, membrana y válvula en la tapa roscada del IBC. Gracias a estas completas variantes de equipamiento, en función del producto envasado y de la aplicación, los clientes se benefician del más alto grado de eficiencia y seguridad.