Entrevista a Jesús Pérez, director del Clúster Innovación Envase y Embalaje
La creatividad y las nuevas ideas a menudo surgen de los más jóvenes. De eso no hay duda. En este sentido, para favorecer el trasvase de la Universidad al tejido empresarial, el Clúster Innovación Envase y Embalaje convoca desde hace años los Premios de Diseño y Sostenibilidad que, apoyados por varias empresas del sector, reconocen el valor innovador de los trabajos presentados. En esta edición, los proyectos ganadores han sido el envase de Teresa Redón, por su proyecto ergonómico para productos de belleza, Adrián Bellés, por su caja de cartón para botellas de cerveza, Pascual Gómez y Borja Sánchez por sus proyectos de cartón para productos de bricolaje, y el equipo formado por Ángela Valle y Antonio Sánchez- Garrido por su envase para pipas en el que se pueden comer y tirar las cáscaras.
Los premios que organiza el Clúster Innovación Envase y Embalaje se han convertido en un referente del sector. ¿Cuándo se creó la convocatoria y qué objetivos tiene?
Los Premios de Diseño y Sostenibilidad del Clúster del Envase y Embalaje nacieron hace ocho años con el objetivo de dar respuesta a las necesidades de las empresas usuarias de envase.
En las primeras ediciones se establecían tres categorías de candidaturas: estudiantes, empresas fabricantes de envases y Estudio de diseño. Pronto, en 2011, nos marcamos el objetivo, de fomentar exclusivamente la colaboración entre empresas envasadoras y estudiantes. Y poco a poco, estos premios se han ido consolidando como un punto de encuentro a nivel nacional entre la Universidad y la empresa.
Haga un balance de los premios, ¿el nivel cualitativo va en aumento en las últimas ediciones?
El número de propuestas y la calidad de las mismas, por parte de los estudiantes ha ido en claro aumento.
En esta última edición hemos recibido 68 proyectos de envase, de más de 100 estudiantes de 12 universidades a nivel nacional. Cada año es más difícil para las empresas destacar el proyecto ganador, porque los estudiantes hacen un trabajo realmente profesional. En esta IV edición ha habido una de las empresas que incluso ha repartido su premio entre dos propuestas.
¿Muchas de las propuestas premiadas terminan teniendo una salida comercial?
Las propuestas presentadas por los estudiantes no son solo bocetos y diseños atractivos sino que contemplan de forma detallada aspectos como la producción del envase, los costes, la usabilidad, el fin de vida o la sostenibilidad. Esto hace que muchas de las empresas participantes se estén planteando la puesta en el mercado de esos envases.
¿Cuáles han sido las propuestas más interesantes en esta edición?
Prácticamente la totalidad de los proyectos presentados cuentan con importantes dosis de creatividad e ingenio. Los 11 proyectos finalistas son especialmente interesantes. Estos proyectos cumplen las expectativas de las 4 empresas que este año, han participado: Heineken España, S.A., Grefusa, S.L. Berioska, S.L. y Leroy Merlin, S.L.U.
Pero, sin duda aquellos más destacados son los proyectos ganadores como pueden ser un envase ergonómico para cosméticos, en el caso de Babaria, en el de Heineken, una caja de cartón para el transporte de las botellas, que además sirve para almacenarlas, y recuerda a las cajas de herramientas. También la bolsa de pipas con dispensador para las cáscaras en el caso de Grefusa, o en el de Leroy Merlin dos proyectos como una caja de cartón con una pestaña elevadora que sirve para destacar en el lineal o una caja en la que se insertan anclajes de cartón para ubicar los diferentes productos.
Además, los premios han contado con importante participación de empresas, ¿cree que las empresas están abiertas a incorporar nuevas fórmulas, ideas y diseños?
Sin ninguna duda, las empresas ven en estos premios la posibilidad de incorporar nuevos conceptos de envases originales e ingeniosos, que además, provienen de estudiantes con visiones amplias, los cuales no tienen sesgos ni tendencias, como en muchas ocasiones ocurre con los departamentos de diseño u oficinas técnicas de las empresas. Y en definitiva, las empresas ven estos premios como una forma de incorporar ese joven talento y aire fresco proveniente de la Universidad a sus departamentos.
En general, ¿a qué retos debe hacer frente el sector del packaging en los próximos años?
Tengo el convencimiento de que antes de que finalice esta década el mercado va a demandar muchas novedades, el salto con respecto a años anteriores va a ser exponencial.
Aspectos como la sostenibilidad, los envases funcionales, la aportación de experiencias al consumidor o la optimización de materiales, son tendencias que están demandándose de una forma generalizada y hacen necesario que las empresas tengan que invertir en nuevos desarrollos para cubrir estas necesidades.
¿Creen que ha habido un crecimiento del sector del envase con valor añadido o premium?
Pensamos que el envase tiene mucho que aportar y que decir, más allá de ser un mero contenedor del producto.
Ahora bien, el valor que aporta el envase dependerá de su uso y funcionalidad que se requiera, para algunos productos un envase atractivo y que genere atracción al consumidor es clave y en otras ocasiones, la reducción de materiales y la optimización de costes es lo que te permite estar fuera o dentro del mercado.
¿Dónde creen que hay nuevas oportunidades de negocio para el sector?
Las innovación es una palanca fundamental en el sector del envase y el embalaje, por lo que es ahí donde radica la verdadera oportunidad de negocio, ser capaces de innovar y diferenciarse.
Claros ejemplos de innovaciones que comienzan a estar en el mercado son, los envases inteligentes, aquellos capaces de transmitir información al consumidor como su estado de frescura, trazabilidad de materias primas o los envases activos, que interactúan con el contenido, por ejemplo alargando la vida útil de un producto.
¿Cómo es, a su parecer, la industria del envase en España, en términos de calidad y competitividad?
Contamos con un sector muy atomizado, donde Cataluña y la Comunidad Valenciana concentran más de la mitad de las empresas del sector.
Por un lado, tenemos una buena base empresarial competitiva, con procesos automatizados y empresas con soluciones adaptadas al cliente y por el otro, todavía hay mucho recorrido hacia el aprovechamiento de las nuevas tecnologías y mejora de la calidad y productividad.
El peso del diseño en el sector del envase, ¿es una ventaja o, por el contrario, aporta presión?
Si tenemos en cuenta que el sector de la alimentación y bebidas y el embalaje industrial son los sectores con mayor demanda de envases y embalajes, el diseño es un factor clave.
Pero el diseño tiene una doble vertiente, debe ser entendido como nuevo concepto de envase, capaz de atraer al consumidor, y por el otro, envase optimizado que permitan, con la menor cantidad posible de material, dar respuesta a las necesidades de las empresas usuarias. De este modo, no aporta presión, sino valor al producto.
¿Qué peso tiene la I+D en este sector?
¿Es un sector marcado por la internacionalización?
Sin duda, y esto se refleja en el hecho de que el comercio exterior del envase continúa incrementando, con unas ventas fuera de nuestras fronteras que rondan los 3.000 millones de euros y con un crecimiento en ventas anual medio del 7% en los últimos tres años.
Mercados como Francia, Reino Unido y Portugal absorben más de la mitad de las exportaciones exteriores.
La sostenibilidad es un reto. ¿Cuál es el papel de la economía circular en esta industria?
Así, el concepto de Economia Circular, ligado a la reducción de residuos y reciclaje, vs Economia Lineal, usar y tirar, comienza a implantarse en la cultura de las empresas, donde ya desde la concepción del diseño del envase -materiales, funcionalidad, uso- se valoran aspectos relacionados con el fin de vida del mismo.
¿Cómo puede ayudar el Clúster Innovación Envase y Embalaje a las empresas del sector?
El Clúster es un caldo de cultivo ideal para la cooperación y la innovación de las empresas. Con una visión neutra a los materiales, el Clúster agrupa a empresas fabricantes de envases, empresas usuarias y centros de investigación, son los agentes necesarios para la búsqueda de nuevas oportunidades de negocio mediante la colaboración.
¿Qué perfil de asociados tienen?
Por un lado, contamos con las empresas asociadas, que conforman la oferta del envase y embalaje. Empresas fabricantes de envases y embalajes que agrupan a toda la cadena de valor -materias primas, transformadores, impresores, sistemas de embalajes, maquinaria de envasado- y por el otro empresas colaboradoras que son las consumidoras de envases y que forman la demanda.
Todas ellas cuentan con un perfil común, se trata de empresas con inquietudes, vocación innovadora y por supuesto, volcadas a la cooperación.
¿Puede destacar algún proyecto de futuro?
Nuestro proyecto, en el corto plazo, van ligados a tres pilares fundamentales.
En innovación, donde fomentamos la cooperación entre los socios para nuevos desarrollos y procesos. En el terreno del networking, donde hemos consolidado los ‘Desayunos Mensuales del Clúster’, por el que una empresa usuaria traslada sus necesidades en materia de envase. Y como último eje, la internacionalización. En estos momentos, estamos poniendo en marcha un proyecto que va a ayudar a las empresas asociadas a implantarse en nuevos mercados exteriores.
