Rolser abre sus puertas a escuelas, asociaciones y entidades

Las visitas en Rolser suelen ser muy interactivas, y empiezan con el visionado de diferentes videos de empresa y producto. A partir de ahí, las visitas ven con ejemplos prácticos la utilidad de un carro en el día a día. Se proporciona alguna pieza del carro, como una rueda, un asa, etc. empieza la visita a fábrica, donde se confeccionará un carro con la participación de todos.

A continuación, se va donde está instalada la troqueladora. Allí se corta una pieza de tela, que se le da a un alumno o persona del grupo. Esa pieza se lleva a serigrafía y al taller de confección donde la bolsa se acaba de coser la bolsa ante las visitas. Esa bolsa acabada se lleva a la fabricación del chasis máquina a máquina, donde se puede ver la construcción de cada pieza. Una vez bolsa y chasis acabados, pasan a la mesa de embalaje, donde se embala en una caja y el grupo de alumnos la llevan al robot que retractila solo los palés y se carga el palé al camión.

Una vez acabada la visita a la fábrica, se les proporciona una plantilla de un carro para que crean un diseño de bolsa al gusto de cada uno. Al finalizar la visita, se regala una ‘shooping’ y una gorra Rolser a todos los participantes.