Los inyectadores se quitan
Una serie de investigaciones muestran cómo empresas, en diferentes países comienzan a abandonar el sector de la inyección y esta pérdida no está siendo favorecida por nuevas creaciones empresariales. De hecho, los estudios desarrollados por la consultora AMI para el Reino Unido y Benelux muestran una caída de entre el 7 y 4 por ciento en el número de operadores, respectivamente, en los últimos tres y cuatro años. Según el informe, una de las causas que han perjudicado mucho al sector británico, es la posición de la moneda del Reino Unido frente al euro. Al mismo tiempo en Europa hay una tendencia hacia la relocalización de la producción a plantas de bajo coste en Europa Central o Asia.
Por otro lado, a pesar de las dificultades a las que se ha enfrentado la industria de inyección en el oeste de Europa, el mercado alemán parece mantenerse estable, de acuerdo a la información de un nuevo informe.
La tendencia apuntada en Reino Unido y Benelux ha sido menos evidente en Alemania. Aunque compañías alemanas han establecido operaciones en Europa central, éstas no han sido siempre a expensas de sus plantas centrales. De hecho, Alemania ha aumentado un 6 por ciento el número de empresas de inyección en tres años
Esto no quiere decir que los inyectadores alemanes no se hayan enfrentado a dificultades. El mayor grupo inyectador en Alemania, suministrador de la industria de la automoción, Peguform, sólo se ha recuperado con su venta a una firma privada de Nueva York, Cerebrus. Previamente, había pertenecido a Venture Holdings Trust.
IBS Brocke también cayó en bancarrota en 2004 pero fue adquirido por Innomotive Systems Europa (ISE). Otros grandes inyectadores del sector de la automoción están en venta incluyendo Dynamit Nobel y Sarnamotive. La inyección representa el mayor sector para la demanda de polímeros dentro de la industria alemana de los plásticos.
El mayor mercado para los inyectadores ha sido la industria del packaging que supuso el 20 por ciento del consumo de polímeros en 2004. Alemania también tiene una industria inyectora extensa y bien desarrollada que sirve la industria del automóvil. Esta última supuso el 21 por ciento de la demanda y del sector eléctrico que registró aproximadamente 17 por ciento.
Pero no todo es negativo. Para aquellas empresas que permanecen en el mercado, AMI prevé un crecimiento modesto en los próximos años. Las estimaciones apuntan a mejoras del 2 por ciento en los países del Benelux, y de entre el 1 y el 2 por ciento en el Reino Unido, lo cual abre un campo de oportunidades para aprovechar el negocio por parte de los inyectadores que sean capaces de dinamizar sus operaciones y enfocarlas adecuadamente y que sepan defender sus márgenes.
Pero, ¿qué pueden hacer las empresas del sector para aprovechar muchas de estas oportunidades?
Se está observando una tendencia hacia la agrupación. Algunas veces los transformadores especializados en un área determinada se unen para formar un clúster. Cada firma del cluster ofrece una gama diferente de servicios especializados para sus clientes, lo que les permite ofrecer un portafolio de productos más amplio que cualquier otra compañía no puede ofrecer por ella misma. En este sentido, incluso las empresas más pequeñas pueden obtener algunos de los beneficios de ser una gran compañía, pero sin perder ni su flexibilidad ni su identidad.
Esto también se relaciona con la forma de comprar material y algunos proveedores están adecuando su oferta a las necesidades de las pequeñas y medianas empresas.