El sector eólico español analiza el diseño de subastas y las oportunidades técnicas, económicas y regulatorias con 2020 como punto de inflexión
Entre los temas que se han abordado en la jornada destacan los relativos a la operación técnica y económica de los parques eólicos y los retos regulatorios futuros hasta el papel de las Comunidades Autónomas.
Ante los compromisos de descarbonización de la economía y la transición ecológica en España, el sector eólico español afronta 2020 como un año de inflexión en su crecimiento con un escenario brillante por delante donde la eólica ofrece un valor añadido adicional por el conjunto de externalidades positivas que ofrece: crecimiento del desarrollo sostenible, creación de empleo de calidad, generación de riqueza en el territorio, una cadena de valor completa y competitiva, con liderazgo tecnológico y posicionamiento internacional de primera fila.
''La visión de la industria eólica para los próximos años es optimista como no puede ser de otra manera”, ha destacado en la inauguración de la jornada José López-Tafall, presidente de la Asociación Empresarial Eólica (AEE). En un contexto donde la Transición Energética es la oportunidad para la industria eólica española de consolidar su liderazgo mundial, el presidente de AEE ha destacado las necesidades concretas del sector como la visibilidad con la aprobación futura del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec), cuya última versión fue publicada ayer, y confirma que la eólica será la tecnología protagonista del mix eléctrico en 2030. “El objetivo es conseguible y el sector se encuentra preparado, y es ahora cuando toca concretar las medidas que se van a adoptar para alcanzar los objetivos, de tal modo que las empresas del sector puedan establecer sus estrategias empresariales para la próxima década, y materialicen las inversiones necesarias para llevarlo a buen puerto”, ha indicado López-Tafall.
José María Marín Quemada, presidente de la CNMC, ha destacado en la inauguración del encuentro que “la eólica es la única energía renovable que ha logrado ser la tecnología que más contribuye al mix de generación eléctrica. Este nivel de desarrollo, que combina madurez tecnológica y dinamismo empresarial es fruto del esfuerzo personal de muchos aquí representados a los que doy mi enhorabuena”. Advirtió que la revisión de la normativa debe compaginarse con la supervisión del mercado. “Sostenibilidad económica y sostenibilidad ambiental son dos caras de la misma moneda, una no se entiende ni es alcanzable sin la otra y contraponerlas solo serviría para hacernos trampas en un juego en el que perderíamos”.
Entre los temas que se han abordado en la jornada destacan los relativos a la operación técnica y económica de los parques eólicos y los retos regulatorios futuros hasta el papel de las Comunidades Autónomas. Las subastas pasadas y futuras ha sido uno de los temas principales de la jornada en un escenario actual de inflexión entre una regulación basada en la remuneración fija por MW, y las nuevas modalidades todavía por concretar. En este contexto, es importante conocer las experiencias de todos los agentes implicados y aprender de las mismas, para valorar su éxito y mejorar su diseño futuro.
Una jornada en la que se han congregado alrededor de 200 profesionales de las principales empresas del sector para identificar y debatir sobre temáticas como el acceso a la red de las nuevas instalaciones e implicaciones para las existentes, el reto de la tramitación ambiental de los proyectos eólicos, las previsiones de la evolución del precio de venta y sus implicaciones en la viabilidad de los proyectos, la operativa económica del mercado en un escenario de alta penetración renovable, la respuesta de la cadena de suministro, el marco regulatorio de las nuevas subastas y su diseño.
