El proyecto desarrollará herramientas de código abierto para la gestión de las comunidades energéticas.
Facilitar el desarrollo de las comunidades energéticas, objetivo del proyecto Comanage
Diez organizaciones europeas, entre ellas Anese, se han unido para dar forma a Comanage, un proyecto del programa LIFE que pretende facilitar el desarrollo de las comunidades energéticas de toda Europa. El proyecto, que se constituyó formalmente a finales de 2022 en Barcelona, tendrá una duración de tres años.
Comanage tiene como objetivo facilitar la sostenibilidad y el crecimiento en las comunidades de energía renovable mediante la creación conjunta de una serie de herramientas de código abierto para apoyar su gobierno y gestión.
El objetivo final del proyecto será doble. En primer lugar, lograr que los proyectos de comunidades energéticas ya puestos en marcha puedan despegar y crecer a medio y largo plazo y, en segundo lugar, alentar y estimular la adopción de nuevos proyectos energéticos de propiedad comunitaria.
A través de la participación de tres estudios de casos clave en Italia, Polonia y España, el proyecto proporcionará los recursos para que los gobiernos locales y regionales fomenten la aceptación y el éxito a largo plazo de las comunidades energéticas.
Las entidades que conforman el proyecto, coordinado por la Asociación Ecoserveis, son la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Energéticos (Anese), Área Metropolitana de Barcelona (AMB), Co-opAbility (Institouto Synetairistikis Kai Synergasias Astiki Mi Kerdoskopiki Etaireia), KMA (Stowarzyszenie Metropolia Krakowska), ANCI Lazio (Anci Associazione Regionale Comuni Italiani Lazio), Aisfor SRL, Metropolis (Association Mondiale des Grandes Metropoles), Spindox Labs SRL y Revolve Water.
Las comunidades de energía poseen o usan un activo de generación (por ejemplo, solar o eólica) donde la energía producida se puede compartir dentro de la comunidad, alimentar la red o venderse a un proveedor. Estas comunidades se han convertido en actores clave en la transición energética limpia, lo que supone un punto de inflexión en la estructura del mercado energético. Según la Comisión Europea, tienen el potencial de brindar beneficios directos a los ciudadanos al aumentar la eficiencia energética, reducir las facturas de electricidad y crear oportunidades de empleo locales.
Tras la adopción de las medidas del 'Clean Energy for all Europeans' incluidas en el paquete legislativo de la Comisión Europea de 2019, cientos de proyectos que impulsan las comunidades energéticas y el 'prosumership' han visto la luz en toda la UE. Un objetivo compartido entre estos proyectos es colocar al consumidor en el centro de la transición energética y desencadenar acciones energéticas impulsadas por los ciudadanos, promoviendo la eficiencia energética dentro de las comunidades locales. Como resultado, en los últimos años, se han lanzado varias iniciativas energéticas dirigidas por ciudadanos. Sin embargo, la experiencia práctica ha puesto de manifiesto que, una vez iniciados, los proyectos de comunidades energéticas suelen tener dificultades para despegar.
Comanage surgió para dar respuesta a la necesidad de las comunidades energéticas de superar las múltiples barreras que impiden su desarrollo. La evidencia práctica de las comunidades energéticas en toda Europa muestra que las barreras legales, administrativas, financieras, sociales y organizativas dificultan la gestión y el gobierno adecuados de las iniciativas de la comunidad energética y el establecimiento de hojas de ruta adecuadas de seguimiento y sostenibilidad a largo plazo.
Al equipar a las administraciones locales con un marco metodológico y un conjunto de herramientas prácticas, Energy Communities Governance Toolkit- ECGT (conjunto de herramientas de gobernanza de las comunidades energéticas), el proyecto facilitará la colaboración entre las administraciones y los ciudadanos en proyectos energéticos.