Las ciudades inteligentes aplican estrategias energéticas locales

Se prevé que para 2050 tres cuartas partes de la población mundial vivan en ciudades. Los urbanistas afrontan esta evolución con escenarios de amplio calado para una visión urbana: la ‘Smartcity’. En el primer SmartCity Expo & World Congress, celebrado a finales de 2011 en Barcelona, se debatió por vez primera cómo debería ser esta ciudad del futuro.

Las ideas allí planteadas son revolucionarias: por una parte, se trata de que los municipios hagan compatibles entre sí datos, redes y circuitos de informaciones, productos, agua, energía e, incluso, movilidad, hasta ahora separados, posibilitando de esta forma el intercambio global. Por otra parte, se persigue la producción local y autárquica: los habitantes de estas ciudades convertirán sus viviendas en recursos de energías renovables, las ciudades fabricarán ellas mismas los productos que necesiten para su propio consumo mediante métodos especiales de ‘Rapid Manufacturing’.

Ya se puede admirar un ejemplo de este planteamiento de producción urbana: un pabellón solar en el Puerto Olímpico de Barcelona. Este edificio de madera se construyó en tan solo un mes con ocasión del congreso Smartcity. Sus diferentes segmentos fueron proyectados digitalmente y fabricados en un corto espacio de tiempo mediante ‘Rapid Manufacturing’, a pesar de la gran diversidad de formas y tamaños a realizar. El pabellón fue diseñado por el Instituto Avanzado de Catalunya y promovido por la empresa Visoren por encargo de Endesa (Empresa Nacional de Electricidad, S.A). Con 25 millones de clientes, esta compañía energética y de servicios es un peso pesado dentro de su sector y ha llevado ya a cabo la gestión energética del proyecto ‘Smartcity Málaga’. Endesa va a implementar también el correspondiente sistema ‘Smartgrid’ para el suministro energético ahorrativo y respetuoso con el clima en las ciudades Barcelona y Búzios (Brasil).

Este pabellón solar de 154 m² de superficie de planta es una alegoría de este planteamiento. Sobre su cubierta lleva montados 80 módulos solares Schott Perform Poly 235 de rendimiento energético especialmente elevado, patrocinados por Schott Solar. Su rendimiento energético específico previsto es de 1.369 kWh/kWp, que se traduce en una generación energética total de 25 MWh/año, mientras que el pabellón necesita como media aproximadamente 4.100 kWh/mes, con un balance de contaminantes de 0 emisiones de CO₂.

El pabellón se utilizará hasta el final de 2012 como centro de control, recinto para foros de debate ‘Think Tank’ y laboratorio de investigación e innovación, abierto a terceras empresas, del proyecto ‘Endesa Smartcity Barcelona’, en el que se invierten 100 millones de euros. En su sala de exposición se presentan diversas iniciativas ‘Smartcity’ de Endesa, que van desde el desarrollo de la electromovilidad, junto con la correspondiente infraestructura de puntos de recarga, y la gestión remota del suministro eléctrico mediante telecontadores digitales, hasta el alumbrado público eficiente. “Este pabellón les muestra a los ciudadanos, las empresas y las instituciones públicas cómo pueden contribuir estas nuevas tecnologías a la mejora de la calidad de vida en la ‘Smartcity Barcelona’”, explica Alex Fábregas, director de la División Catalunya Centro de Endesa. La energía solar también desempeñará un papel clave sobre la cubierta del mayor número posible de edificios de Barcelona, igual que ahora lo hace sobre el pabellón solar.