El ‘Estudio sobre los efectos del incremento de la capacidad de la interconexión eléctrica hispano-francesa sobre el mercado diario español de la electricidad’, presentado en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales (ETSII) de la Universidad Politécnica de Madrid, concluye que esta ampliación tendría un efecto neto positivo.
El estudio ha sido elaborado por el doctor Ingeniero Industrial Manuel Álvarez Fernández. A la presentación asistieron, además del autor, Rocío Hortigüela y Antonio Navarro, copresidentes de UNEF y Jorge Morales de Labra, miembro de la junta directiva de UNEF. Tras la presentación del estudio, Jorge Morales analizaron en términos económicos lo que supondría el aumento de la interconexión para los consumidores españoles, concluyendo que “el aumento de las interconexiones eléctricas siempre es positivo para el sistema español, pero es necesario que este aumento venga acompañado de medidas regulatorias que equilibren los beneficios entre los agentes afectados”.
El estudio se ha realizado efectuando simulaciones de las casaciones horarias con los datos de las curvas de oferta y demanda del año 2010 y analizando las modificaciones que se hubieran producido si se hubiera ampliado la capacidad de la interconexión (se contemplan ampliaciones escalonadas entre 1.000 y 5.000 megavatios). A la vista de las simulaciones realizadas, el estudio concluye que —durante las horas de saturación de la exportación— la generación tendría un incremento del excedente y que la demanda sufriría una disminución, invirtiéndose la situación durante las horas de saturación de la importación. El incremento del precio de mercado se compensaría con las disminuciones que producirían las importaciones a precios más baratos. Sobre el precio medio horario de 37 euros/MWh de 2010, el incremento estimado para la máxima ampliación de la capacidad sería de 0,5 euros/MWh.
En términos generales el balance neto de la ampliación de la capacidad de interconexión eléctrica es positivo y supondría unos diez millones de euros para una ampliación de 2.000 megavatios, alcanzándose los cincuenta millones de euros si la ampliación fuese de 5.000 megavatios.