Los sensores de presión de VEGA garantizan la seguridad y una mayor eficiencia en la industria del hidrógeno

En la industria del hidrógeno, sería imposible garantizar que una operación es segura sin unos transmisores de presión fiables. De modo que los requisitos en cuanto a su precisión y estabilidad a largo plazo son elevados. Además de esto, los sensores de presión también desempeñan un papel importante en la eficiencia y la rentabilidad.

Si necesita un sistema con el que tratar sus productos a muy alta presión, ya sean líquidos o gases, seguro que termina recurriendo a la empresa española Hiperbaric. Con sede en Burgos, al norte de Castilla y León, este líder mundial en tecnología de alta presión suministra, desde hace más de 25 años, sistemas de alta presión para la industria alimentaria y de bebidas, así como para el prensado isostático en caliente (HIP), que se utiliza para componentes críticos en sectores como el aeroespacial, el aeronáutico, la industria energética, en el Oil & Gas, en automoción o los implantes médicos. Otro pilar de la empresa son los sistemas de compresión de hidrógeno obtenido a partir de energías renovables. La tecnología de compresión, desarrollada por Hiperbaric, permite alcanzar una compresión del gas de hasta 1.000 bar. Esta resulta idónea para comprimir hidrógeno verde para su posterior almacenamiento o uso, por ejemplo, en HRS (Hydrogen Refuelling Station) a 350 bar, para camiones y autobuses, o a 700 bar para vehículos con pilas de combustible de última generación. Este pionero español del hidrógeno ha puesto ya en marcha alrededor de 30 sistemas de hidrógeno en varios clientes europeos.

Solución 'plug-and-play' en el depósito. La tecnología de compresión de hidrógeno de Hiperbaric conecta los compresores en serie. Una medición fiable de la presión es fundamental en el proceso de compresión. Imagen: Hiperbaric. Copyright: Hiperbaric.

Aunque el hidrógeno se considera fundamental para la transición energética y una economía mundial sostenible, los costes asociados siguen siendo muy elevados. Resulta de vital importancia que los procesos relacionados con el hidrógeno se desarrollen de forma eficiente, segura y sin pérdidas. Aquí es donde entra en juego VEGA: su tecnología de medición de presión garantiza que se utilicen las cantidades y presiones correctas en la cadena de valor del hidrógeno, ya sea en el electrolizador, en el depósito de almacenamiento o en la tubería.

En los compresores fabricados por Hiperbaric, por ejemplo, los transmisores de presión de la serie VEGA miden la presión del hidrógeno en la entrada y en la salida de los compresores. Uno de los grandes desafíos para los transmisores que miden la presión de hidrógeno es el riesgo de difusión: VEGA da solución a este problema gracias a su amplia gama de equipos: con membrana de acero inoxidable resistente hasta 1.000 bar, con membrana cerámica Certec hasta 100 bar, o con membranas con recubrimientos de oro, o rodio y rodio. Todas ellas combinadas con conexiones de alta presión.

La tecnología de compresión de hidrógeno de Hiperbaric consta de una serie de compresores que proporcionan una solución completa 'plug-and-play' para un suministro seguro, eficiente y fiable de hidrógeno comprimido a alta presión: "Nuestra tecnología de compresión del hidrógeno se suministra en un formato tipo contenedor", afirma Luis Ángel Ramos, jefe de ingeniería eléctrica de Hiperbaric, al describir los sistemas. La compresión se realiza en dos sofisticadas etapas idénticas, conectadas en serie, mediante un compresor de tipo pistón.

En la primera etapa, el hidrógeno entra en la cámara del compresor con una presión de entrada de entre 20 y 200 bar. En función de ésta, el hidrógeno se precomprime a una presión intermedia, comprendida entre 200 bar y la presión máxima de salida. Como resultado de esta compresión el hidrógeno aumenta de temperatura, lo que hará necesario pasarlo por un intercambiador de calor previo a la segunda etapa. Gracias a éste, el gas entra en esta segunda etapa de por debajo de 40 °C y se comprime hasta los 1.000 bar. Posteriormente, el hidrógeno ya altamente comprimido, pasa por otro intercambiador de calor y se almacena finalmente en un depósito, y poder utilizarse así de diversas formas.

Las condiciones operativas del compresor deben adaptarse con precisión a la presión de entrada y de salida, por lo que es fundamental contar con una medición fiable de la presión. Además, por razones de seguridad, es importante monitorizar la presión en diferentes puntos.

Las condiciones para los sensores de presión en este proceso de compresión son exigentes. «La manipulación del hidrógeno requiere el máximo nivel de fiabilidad y precisión», resume Ramos. Las temperaturas oscilan entre -10 y +40 °C y la presión desde 1 hasta 1000 bar, así como su uso en todo tipo de entornos. VEGA ofrece soluciones fiables en tecnología de medición de nivel, presión y presión diferencial para toda la gama de aplicaciones de hidrógeno, independientemente de si se trata de productos corrosivos, mezclas de hidrógeno y oxígeno, o productos con una constante dieléctrica baja. Los transmisores de presión VEGABAR 82 y 83 cumplen con los requisitos de seguridad más exigentes, como ATEX y SIL, y ofrecen una gran estabilidad a largo plazo. Estas fueron las razones más importantes para que Hiperbaric confiara en nuestra probada serie de sensores para sus sistemas de hidrógeno: "Necesitamos sensores que funcionen de forma 100% fiable y segura. Por eso elegimos a VEGA", explica Ramos.

Los sensores de presión de proceso de la serie VEGABAR miden la presión del hidrógeno tanto en la entrada como en la salida de los compresores. Imagen: Hiperbaric. Copyright: Hiperbaric.

En presiones de proceso elevadas, de hasta 1.000 bar, el VEGABAR 83 impresiona gracias a su celda de medición seca, con galga extensiométrica, y ofrece una medición estable a largo plazo. El VEGABAR 82, con su celda de medición cerámica Certec sin aceite, resiste incluso productos corrosivos como la potasa cáustica. Gracias a su alta capacidad de sobrecarga, de hasta 200 veces, ha demostrado su eficacia en todo tipo de industrias. Además, la celda de medición cerámica es resistente a los choques térmicos y soporta temperaturas de hasta 150 °C.

La instalación de los sensores es cómoda y sencilla, gracias a unas conexiones de proceso pequeñas: "Nuestro propio equipo de Hiperbaric se encargó de instalar los instrumentos, con la asistencia técnica de VEGA", afirma Ramos, quien quedó muy impresionado por el compromiso de VEGA durante la puesta en marcha. Los sensores ya llevan un año en funcionamiento y se han ganado un puesto fijo. Ahora están en cada uno de los grupos compresores, en la entrada y la salida de hidrógeno.

La enorme dinámica del mercado del hidrógeno también se refleja en el día a día de Hiperbaric. Hasta ahora, la empresa ha duplicado su negocio de compresores de hidrógeno en Europa y trabaja ya en su lanzamiento en EE. UU., donde ya cuenta con una sólida posición en el mercado de la tecnología de alta presión para el sector alimentario, de aquí al 2025. A pesar de esta dinámica, no pierden de vista la seguridad y la rentabilidad. VEGA apoya a este fabricante de sistemas y garantiza que los procesos se desarrollen de forma eficiente, segura y, sobre todo, sin pérdidas.