XIX Congreso de la Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica
CIDE afirma que la electrificación de la demanda es un reto prioritario para la transición energética
Durante el XIX Congreso de la Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica (CIDE), celebrado en Toledo el pasado 25 de octubre, se destacó la necesidad urgente de invertir en redes eléctricas para cumplir con los ambiciosos objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC). Las pequeñas y medianas distribuidoras, claves en la transición energética rural, reclaman un marco normativo que incentive la inversión necesaria para modernizar el sistema eléctrico en España.
CIDE ha puesto de manifiesto la urgencia de abordar la electrificación del consumo en España para cumplir con los objetivos de transición energética. En el XIX Congreso de la entidad, celebrado en el Palacio de Congresos de Toledo, los más de 450 profesionales del sector reunidos coincidieron en señalar que, sin un incremento en la inversión y modernización de las redes eléctricas, los retos planteados en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) serán inalcanzables. Este plan contempla una inversión total de 52.000 millones de euros en infraestructuras hasta 2030.
Gerardo Cuerva Valdivia, presidente de CIDE, explicó durante su intervención que la electrificación del consumo es un reto ineludible para facilitar al cliente un acceso fiable y rápido a la energía eléctrica. Para ello, subrayó la importancia de crear un entorno regulatorio atractivo que permita atraer las inversiones necesarias en las redes eléctricas, afirmando que "el capital irá donde más certidumbre halle y donde mejor sea retribuido".
El congreso también fue un espacio de debate sobre la situación en la España rural, donde las pequeñas y medianas distribuidoras de energía tienen un papel crucial. Estas empresas, que prestan servicio a más de dos millones de personas en medio millón de hogares, juegan un papel determinante en el desarrollo social y económico del entorno rural. En este sentido, se destacó que el despliegue de infraestructuras eléctricas es esencial para cerrar la brecha energética en estas áreas, especialmente en cuanto a la movilidad sostenible y la electrificación del transporte.
Además, representantes de la Administración, como Emiliano García Page, presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, coincidieron en la necesidad de impulsar rápidamente las redes eléctricas para evitar los cuellos de botella que están paralizando el desarrollo urbano e industrial en diversas zonas del país.
En cuanto a las energías renovables, se recordó que estas ya representaban más de la mitad de la electricidad generada en España en 2023. Sin embargo, la electrificación del consumo sigue siendo un desafío, situándose en un 23,3% para ese mismo año. El PNIEC fija como objetivo alcanzar un grado de electrificación del 35% para 2030, lo que supone un incremento significativo en la demanda de electricidad.
Finalmente, las empresas de CIDE reiteraron su compromiso con la transición energética en el medio rural, resaltando la importancia de un marco regulatorio que permita realizar las inversiones necesarias para modernizar y digitalizar las redes eléctricas. Según los expertos presentes en el congreso, la estabilidad normativa y la equidad en los modelos retributivos son claves para asegurar que las pequeñas distribuidoras puedan continuar impulsando el desarrollo energético de las zonas rurales de España.