Las reducciones de costes de la eólica marina llegan al Reino Unido
WindEurope da la bienvenida a los resultados de la última subasta de Reino Unido denominada Contrato para las diferencias (CfD) anunciada por el Departamento de Negocios, Energía y Estrategia Industrial, donde la eólica marina presentó ofertas récord de 57,50 £/MWh incluyendo los costes de conexión a la red.
Los proyectos eólicos marinos ganadores: Hornsea 2 de DONG Energy, Triton Knoll de Innogy y Statkraft y Moray de EDPR y Engie – ofrecerán 3,2 GW de capacidad al Reino Unido, suficiente para alimentar 3,3 millones de hogares.
El coste de la energía eólica marina ha caído un promedio del 47% desde que se anunciaron los últimos resultados de las subastas CfD en febrero de 2015. Estas reducciones se deben a la rápida maduración de la industria, al desarrollo tecnológico y a las economías de escala. El compromiso a largo plazo del Gobierno de Reino Unido con la eólica marina también ha tenido un impacto positivo. Los nuevos proyectos constituirán un estímulo para la industria eólica marina, creando inversiones y apoyando puestos de trabajo altamente cualificados en Reino Unido.
La industria eólica ha más que cumplido la promesa del gobierno británico de tres rondas de CfD antes de 2020 a cambio de reducciones de costes. El modelo CfD de Reino Unido ha demostrado ser eficaz, proporcionando estabilidad de ingresos, reduciendo el coste de las finanzas y, sobre todo, reduciendo los costes para los consumidores de energía.
«Los resultados notables de esta última subasta CfD de Reino Unido destacan los grandes avances realizados por la eólica marina en los últimos años«, declara el CEO de WindEurope, Giles Dickson. «A la luz de estas últimas reducciones de precios, pedimos al Reino Unido y a otros gobiernos europeos que asuman compromisos ambiciosos sobre los futuros volúmenes de despliegue de energía eólica marina. La eólica marina ha demostrado ahora que proporciona un valor excelente por el dinero de los contribuyentes. Para sostener estas reducciones de costes, la industria debe poder planificar con anticipación, especialmente para el período posterior a 2020, lo que supone una visibilidad de al menos tres años sobre el calendario y el volumen de las subastas.»