Wärtsilä se adjudica contratos EPC para dos centrales eléctricas en Latinomérica
Los pedidos de EPC se realizaron en marzo de 2020 y los acuerdos de O&M poco después. Los acuerdos de O&M entrarán en vigor cuando las plantas comiencen a operar, y Wärtsilä reconocerá la recepción de pedidos después de la puesta en servicio. Cada planta operará utilizando once motores de gas Wärtsilä 50SG y juntos producirán más de 400 MW de potencia. La electricidad producida será inyectada a la red nacional en modo de carga base flexible. La flexibilidad de arranque rápido de la solución Wärtsilä permite la integración eficiente de grandes cantidades de energía renovable, como solar y eólica, en el sistema.
Las capacidades flexibles de carga base de la solución Wärtsilä incluyen una eficiencia sobresaliente, incluso en temperaturas ambiente altas, mientras que el consumo de agua es cero. El ensamblaje multimotor permite una ampliación sencilla de las plantas en caso de ser necesario, y garantiza una alta disponibilidad, ya que siempre hay motores en funcionamiento mientras uno puede estar en mantenimiento. Una configuración multimotor también es una ventaja clave para garantizar la mayor eficiencia a carga parcial.
Se espera que las dos plantas estén operativas a finales de 2021. Con la solución de operación y mantenimiento, Wärtsilä asume la responsabilidad total de las centrales y garantiza el rendimiento de las plantas. Con un enfoque holístico, las innovaciones digitales y el análisis avanzado se combinan para optimizar las actividades de operación y mantenimiento con el perfil operativo de la planta. Las centrales eléctricas de motores de gas de Wärtsilä pueden utilizar gas natural, GLP, combustibles sintéticos y varios combustibles de biogás. La eficiencia es alta incluso en ciclo simple y no se necesitan compresores de gas ya que la presión de gas requerida es de solo 5 bar. Los motores de gas tienen un excelente rendimiento medioambiental, ya que la tecnología de combustión de mezcla pobre en la que se basan crea niveles de emisión muy bajos. Con la adición de una unidad de reducción catalítica selectiva, se pueden cumplir incluso los estándares de emisiones más estrictos del mundo.