Master Rótulo refuerza su capacidad de producción con la instalación de una unidad Durst P5 210
Master Rótulo, empresa ubicada en San Fernando de Henares (Madrid), refuerza su capacidad de producción con la instalación de una nueva unidad P5 210, de Durst, que tuvo lugar hace tan solo unas pocas semanas.
En estos momentos, la empresa madrileña da respuesta a más de cuatrocientos pedidos mensuales. El 60% de ellos cumplen con un time-to-delivery de entre 24 y 48 h. “Nosotros somos producción, siempre cumplimos nuestro compromiso con los plazos de entrega, ofreciendo, además, un trato ágil y cercano”, señala Vicente Adán, director general de la empresa madrileña, quien destaca que, pese a la tendencia de automatización del sector —también de las actividades comerciales—, prefieren mantener un trato cercano y personalizado sin detrimento de la rapidez de respuesta, ofreciendo presupuestos, por ejemplo, en tan solo unas horas gracias a un equipo humano plenamente orientado al público y muy profesionalizado.
Los clientes de Master Rótulo son, en su mayoría, otras compañías del sector —con las que mantienen una relación de partnership, convirtiéndose en “su centro de producción”— y agencias de publicidad, pero también atienden pedidos de particulares. “No hacemos distinción entre clientes, ya sea una gran marca, una agencia o un particular; siempre tratamos de dar el mejor servicio y, por supuesto, con la mejor calidad. Por ello, entre otros motivos, tenemos una tasa de rotación de clientes mínima, lo que nos sirve de indicador sobre su nivel de satisfacción y de lo que nos sentimos muy orgullosos”, recalca el director general.
La P5 210 —la solución inkjet híbrida de Durst para impresión de planchas y de bobinas, que ofrece una calidad de impresión de hasta 1.200 dpi y una productividad de hasta 240 m2/h—, se suma al parque de maquinaria de la empresa madrileña, que cuenta en estos momentos con otras dos máquinas Durst, además de otras soluciones, también de acabado. “Nuestra apuesta continua por la marca tiene su base en la confianza que nos trasmite tanto la tecnología como el equipo humano que hay detrás de Durst Ibérica”, concluye Vicente Adán.