La ATE presenta observaciones clave a la metolodía de retribución del transporte de energía eléctrica
La Asociación para la Transición Energética (ATE) ha presentado una serie de observaciones a la consulta pública sobre la revisión de la metodología de cálculo de la retribución de la actividad de transporte de energía eléctrica, en el marco del próximo periodo regulatorio 2026-2031. Entre las principales observaciones realizadas por la asociación a esta consulta pública destacan: una planificación flexible y ágil, inversiones anticipadas, eliminación del límite legal de inversiones y un marco retributivo predecible.
En sus aportaciones, la asociación subraya que las redes de transporte y distribución de electricidad son la “piedra de toque” de la transición energética y digital, desempeñando un papel fundamental en la integración de las energías renovables y en la flexibilidad de la demanda. Sin un fortalecimiento de estas redes, advierte la organización, se corre el riesgo de retrasar la electrificación y frenar proyectos estratégicos de descarbonización en España.
Observaciones
La asociación propone una revisión periódica de la planificación de redes cada dos años, con el objetivo de responder con mayor rapidez a las necesidades de conexión, tanto de la generación como del consumo de electricidad.
Asimismo, la organización pone de manifiesto la necesidad de anticipar las inversiones necesarias para el sistema eléctrico, en lugar de gestionar cada solicitud de forma individual.
Se sugiere también la necesidad de modernizar y expandir las redes eléctricas a través de la eliminación de los actuales límites legales en las inversiones, lo que permitiría afrontar los retos de la descarbonización y una modernización definitiva del sistema eléctrico.
Por último, se plantea la necesidad de simplificar y hacer más estable el marco retributivo, adaptándolo a los nuevos retos que impone la transición energética, garantizando una rentabilidad justa y competitiva para las empresas del sector que refleje adecuadamente los costes y riesgos asociados.
Un momento crucial para el nuevo modelo energético
Según el análisis presentado por la asociación, se estima que para cumplir con los objetivos de descarbonización establecidos en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), España necesita una inversión acumulada en redes y electrificación de más de 55.000 millones de euros hasta 2030; al tiempo que añade que sin una planificación ágil y un marco retributivo que incentive estas inversiones, el país podría perder oportunidades industriales y económicas clave.
Así las cosas, la Asociación para la Transición Energética (ATE) destaca que nos encontramos en un momento crucial para sentar las bases de un modelo energético sostenible y competitivo; al tiempo que reitera su compromiso de colaborar con las autoridades y el sector privado para asegurar que las redes eléctricas estén a la altura de los desafíos del futuro.