Innovación para la distribución de alimentos… o control total para las GDO
En el Macfrut de Cesena apareció de nuevo el debate. ¿Por qué hablar otra vez sobre la modernización de los mercados mayoristas de frutas y hortalizas? ¿A las innovaciones en distribución mayorista de alimentos frescos les interesan la renovación de actividades económicas en el centro de las ciudades? ¿Qué papel podrían jugar los ayuntamientos en la modernización de la distribución de alimentos frescos?
Hay quienes proponen más modelos de actividades para los mercados mayoristas. Mercados convertidos en ‘city logistic’ para contribuir a optimizar el tráfico en el centro de las ciudades. Serian como ‘food hub’ modernos con unidades de carritos homologados (‘picking’) para distribuir los productos de la moderna alimentación en el área metropolitana mediante medios ligeros (furgonetas de tracción eléctrica, ¿por qué no?).
El nuevo mercado mayorista tiene que responder a las necesidades de la clientela. Los nuevos mercados serán plataformas de gestión sostenibles con ofertas integradas, y no parkings de camiones y furgonetas. El nuevo mercado será libre de horarios, nada de trabajar solo de noche. La gente que trabaja de noche no es innovadora, porque lo que tiene es sueño. En el nuevo mercado habrá gestión de la calidad en los productos, procesos y del ambiente.
De la cooperación entre ayuntamientos, mercados mayoristas y organizaciones de productores de alimentos (las OPFH, por ejemplo) aparecerán los nuevos modelos de actividades económicas, para la horticultura, por ejemplo. Actualmente en las industrias hortícolas lo común es ya usar lo último de lo último en las tecnologías de poscosecha. Estas tecnologías se orientan al ‘fresh for longer’ y las formas cómodas de consumo, congelados, conservas, IV, V y VI, esta última para los chefs más cualificados y la cocina de composición, … zumos, sopas, cremas. En frutas y hortalizas los consumidores no querrán siempre más de lo mismo, se aburrirían, … preferirán diversidad.
El consumo actual en los centros urbanos ya no sigue las reglas de la memoria histórica de comprar y consumir. Hay una mezcla de productos que se compran en el supermercado y otros “iguales” que los comemos en establecimientos de hostelería tipo fast food. La gente quiere comer, bueno, sano, rápido, y… a buen precio.
¿Qué puede hacer la horticultura para participar de estos cambios? ¿Podría impulsarlos? Los conocimientos técnicos y científicos están más cercanos a los productores de frutas y hortalizas que de los empresarios de las tiendas de fruterías (diversidad varietal, cultivos sin suelo, frutas y hortalizas con residuos cero, frutos long shelf life, … trazabilidad y normativas de seguridad alimentarias, …). En cambio, por el otro lado, en la distribución minorista lo que hay aún son establecimientos comerciales con modelos de negocio de hace 200 años. Con aplicarles la legislación de manipulación de alimentos la mayoría desaparecerían o tendrían que hacer un buen restyling.
A la gente, inquieta para los nuevos negocios, les he oído hablar del fenómeno de la ‘open innovation’. Para crear los nuevos modelos de negocios en la distribución de los productos de la horticultura creo que hace mucha falta. La innovación abierta comparte la cocreación entre profesiones. Las empresas ya existen, parece que la nueva idea es gestionar el ‘think tanks’ para encontrar, evaluar y crear oportunidades de negocios o aportar conocimientos, entre ellas.