La industria cárnica catalana denuncia trabas de las administraciones a la exportación
29 de noviembre de 2011
La industria cárnica es un sector estratégico dentro de la economía catalana, supone el 18% del PIB industrial catalán y el 3% del PIB absoluto de Cataluña, pero parece que las administraciones no tienen en cuenta este importante dato, vistas las actuaciones que llevan a cabo hacia las exportaciones de este sector, según apuntan desde FECIC.
No parece que tenga mucha importancia que la industria cárnica catalana alcance un volumen de producción anual de 2,4 millones de toneladas y exporte el 63% del total de carnes y productos cárnicos de todo el estado español, visto que tanto el Govern de la Generalitat como el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) no hacen nada por resolver su problema con las exportaciones, aunque a menudo manifiestan que la salida de la crisis pasa por el comercio exterior y que han prometido en numerosas ocasiones ayudar a la internacionalización del sector.
Las empresas cárnicas catalanas llevan tiempo sufriendo esta situación, que empezó con los impuestos que asignó el Govern a los exportadores cárnicos para conseguir los certificados de los Servicios Veterinarios Oficiales y que ha llevado al sector cárnico a interponer en los tribunales de justicia 93 recursos contra la Generalitat por esta cuestión. Lejos de resolver este problema, se aprovechó una modificación administrativa para aumentar en un 1004% estos tributos, que sólo se pagan en Cataluña. Este agravio comparativo con el resto de España y con otros sectores industriales a los que se apoya ampliamente pone en una situación complicada al comercio exterior del sector cárnico.
La semana pasada, el MARM ponía en marcha un nuevo sistema para facilitar los trámites a la exportación, suprimiendo el certificado sanitario, pero en lugar de facilitar los procesos a las empresas la situación se ha agravado, hasta el punto de poder afirmar que la inspección del Puerto de Barcelona ha aprovechado el nuevo procedimiento para llevar a cabo una actitud obstruccionista, que está dificultando incomprensible e injustificadamente el tránsito normal de expedición de mercaderías cárnicas, básicamente a países del sureste asiático. Tenemos que recordar que en Cataluña estas exportaciones alcanzan un volumen de 850.000 toneladas y aportan un saldo neto a la balanza agroalimentaria catalana superior a los 1.200 millones de euros.
La
FECIC pide respuestas, compromisos y soluciones de las administraciones ante este conflicto, para evitar que se vuelvan a repetir situaciones como las que se están denunciando ahora, en materia de trámites a la exportación.