El incendio de Aneto evidencia la falta de medios en la Ribagorza

El fuego comenzó a última hora del sábado en el núcleo de Aneto, en Montanuy, próximo a la zona que se vio afectada por el incendio de marzo del año pasado y que arrasó más de 2.000 hectáreas de monte, obligando a evacuar 13 núcleos de las inmediaciones de Castanesa. Sin embargo, en esta ocasión las llamas no han amenazado ninguna localidad y las bajas temperaturas y la ausencia de viento han ayudado a controlar el fuego. El Gobierno de Aragón prevé darlo por extinguido a lo largo de la jornada de hoy martes.
Las primeras investigaciones apuntan a que se trata de un incendio provocado. El fuego comenzó en tres focos distintos, en una zona muy escarpada, a unos 1.500 metros de altura, y coincidiendo con la Cabalgata de Reyes de Montanuy. La intervención de los bomberos de Benabarre y de los efectivos catalanes de Vielha, Tremp y Pont de Suert, esa misma noche, y la incorporación al día siguiente de helicópteros de Aragón, Cataluña, Valencia y Navarra y de dos hidroaviones del Ministerio de Medio Ambiente con base en Torrejón de Ardóz, así como efectivos de la Unidad de Militar de Emergencias (UME) y la colaboración de agentes forestales del Gobierno de Aragón, favoreció que el fuego se diera por controlado el lunes a mediodía.
A falta de la medición definitiva, las llamas han afectado a unas 300 hectáreas de pasto y pinar de alta montaña, ubicados en monte comunal. Las llamas no han afectado a ninguna localidad ni granja, pero en los municipios de Montanuy, Laspaúles y Bonansa el fuego reabrió, en un primer momento, los miedos vividos en el incendio del año pasado. Teniendo como referencia aquel episodio, y viendo que los problemas de entonces aún no se han solucionado, los vecinos de estos núcleos, agrupados en la Asociación por el Desarrollo de la Montaña, han denunciado la falta de medios que hay en la zona para luchar contra este tipo de sucesos y la necesidad de completar los trabajos iniciados la pasada primavera.
La agrupación señala que el incendio ha sido, “una intolerable y peligrosa acción”, que ha puesto en peligro zonas de alto valor medioambiental, “ya que es una zona colindante con el parque natural Posets-Maladeta”. Sin embargo y a pesar de esa riqueza natural, los vecinos reconocen que en la zona no hay medios suficientes para hacer frente a incendios forestales: “Los retenes de incendios más cercanos se encuentran desactivados y los parques de bomberos aragoneses están a más de una hora de camino”. Por ello, y “dada la repetición de incendio en invierno”, la agrupación considera necesaria la implantación de medios en la zona durante todo el año.
Asimismo, y aunque la asociación ya lo denunció el pasado mes de diciembre (ver información), reclama que se concluyan las tareas iniciadas la pasada primavera, “haciendo perímetros de seguridad en los pueblos y programas de gestión y limpieza de bosques”. Los vecinos reclaman especialmente que se concluyan las limpiezas iniciadas y recuerdan que, a pesar de las afecciones que dejó el pasado incendio, la zona de Castanesa “quedó fuera del decreto de ayudas del Gobierno de España”.
Reclamación sorda
No es la primera vez que los vecinos de Montanuy, Laspaúles y Bonansa reclaman más atención y medios para la Alta Ribagorza. El alcalde de Montanuy, José Mª Agullana, solicitaba el pasado marzo “replantear las medidas y planes de gestión que se están aplicando en el Pirineo y mejorar los medios que tenemos los pequeños ayuntamientos como los nuestros”. El munícipe explicaba los principales problemas de la zona, “son núcleos con población mayor y accesos complejos”, por lo que es fácil que la zona “caiga en el olvido de las administraciones”. (Ver artículo)
Además, los vecinos lanzaron otra reclamación, la mala gestión forestal implantada en el Pirineo: “La falta de actuaciones de limpieza y ordenación de los montes y bosques ha permitido que la masa vegetal y arbórea crezca sin control generando una sobrepoblación forestal que, como se ha visto en Castanesa, favorece la rápida extensión de las llamas”, indicaron entonces. En principio esta última reclamación se verá recogida en la modificación de la Ley de Montes que el Gobierno de Aragón prevé sacar en este 2013, pero habrá que esperar a la versión definitiva para conocer hasta dónde llega la reforma y si sirve para mejorar la gestión forestal en el Pirineo.
Información de Pirineo Digital