El refugio de Góriz cumple 50 años

El pasado sábado se cumplieron 50 años desde que el Refugio de Góriz comenzara a dar servicio a los montañeros que desde 1963 se acercan hasta el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Un acto institucional y un almuerzo popular han puesto la nota festiva a la jornada de este sábado. Mañana domingo tendrá lugar una jornada de montañismo, tras haberse cancelado el pasado fin de semana.
Góriz es un refugio de altura, 2.200 metros, y sólo se puede acceder a pie desde el aparcamiento de la Pradera de Ordesa, por la ruta normal. Los guardas titulares son Joan María Vendrell, Borja Fernández, Ibán Urbieta y Luis Muñoz, que mantienen abierto y guardado el refugio todos los días del año. Abastecen el refugio con helicópteros, las caballerías o la “clásica” mochila a la espalda.
Cuenta con 72 plazas en literas corridas con colchón, manta y almohada, en tres dormitorios. Tiene servicio de desayuno, almuerzo, cena y pic-nic, así como un bar abierto todo el día con bebidas calientes y frías y duchas (de agua fría eso sí). Además, posee una cocina libre, alquiler de sacos y sábana, zapatillas para andar por el refugio, botiquín, emisora de emergencia y hasta teléfono público.
Este refugio es el emblema de todos los aragoneses, con una posición privilegiada para los deportes de montaña, para ascender al Monte Perdido por varias rutas o al Cilindro, Soum de Ramona, Marboré, Casco, Taillón, Brecha de Rolando o a la gruta helada de Casteret. Además, presume de tener uno de los itinerarios más bellos de todo el Pirineo, remontando el cañón de Ordesa.
Información de Aragón Digital