Avistados 18 osos en la Cordillera Cantábrica
La Fundación Oso Pardo ha avistado en febrero, tras las fuertes nevadas, a dieciocho osos activos en la Cordillera Cántabrica, entre ellos un macho adulto solitario de gran tamaño en buenas condiciones físicas y alimenticias, algo no habitual en el "mes de hibernación por excelencia" y que podría suponer un cambio de comportamiento en la especie.
Según ha explicado el presidente de la Fundación Oso Pardo, Guillermo Palomero, los animales avistados pertenecen a seis familias distintas de osa adulta con crías, además de dos animales adultos solitarios, entre ellos el macho de gran tamaño. Las patrullas de la Fundación los han localizado en tres puntos diferentes de la Cordillera: en el alto Sil leonés, en Somiedo y en Cantabria.
Según ha apuntado la Fundación, la pauta general en la vida de los osos pardos es la hibernación durante los meses más fríos, normalmente de enero a marzo. Sin embargo, a pesar de ello, en los últimos años se está advirtiendo que algunas osas con crías permanecen activas, especialmente en los inviernos más suaves y con abundante comida, algo que tiene una explicación "razonable" en el hecho de que para recuperarse de la pérdida energética y el desgaste que les supone la lactancia. Sin embargo, en el caso de los machos, hembras no lactantes o juveniles ya desarrollados, lo habitual es la hibernación que en la Cordillera Cantábrica dure en torno a dos meses.
Por ello, el hecho de ver a ejemplares machos adultos en este época "abre interrogantes" que, según Palomero, no se puende responder ahora y será el tiempo el que tendrá que demostrar si se trata de algo "anecdótico" o una muestra de un cambio de pauta o de comportamiento en esta especie en lo que podría ser una adaptación a inviernos mas suaves.
Según el presidente de la Fundación, por el momento sólo se puede recopilar información y no será hasta dentro de "años" cuando se pueda aclarar la cuestión.
Información de El Diario Montañés