Pau Capell defenderá título en una UTMB 2022 con cartel de lujo
Es la carrera por montaña por excelencia: tiene pedigrí, un recorrido que da la vuelta ni más ni menos que al macizo del Mont Blanc, tiene épica con sus 171 kilómetros y 10.000 metros de desnivel positivo y, este año, tiene también un cartel de auténtico lujo, con todos los cromos de las estrellas mundiales del trail running en acción. Entre ellos, el último vencedor de la prueba, el atleta de RSM Spain Pau Capell, que acude a la cita tan confiado en su momento de forma y buenos tiempos como consciente de que, este año, la victoria estará muy cara.
El viernes a las 18 horas Chamonix será un bullicio y vivirá la salida de la prueba reina del UTMB 2022. En la línea de salida estará Capell, que afronta la carrera "con mucha ilusión y ganas porque el año pasado no pude disputarla. Entre los corredores que participan soy el último ganador de la prueba y eso me da una motivación extra porque el corredor que ganó el año pasado no participa", explica en referencia al francés François D'Haene.
El atleta de RSM Spain llega a la prueba en un buen estado de forma después de haber sido baja el año pasado por lesión y de haber pasado el Covid este año. "He entrenado igual y he competido en carreras similares que cuando gané. Creo que llego en buena forma, aunque obviamente se tiene que ver en competición. El Covid que pasé Lavaredo no me ha dejado secuelas. Físicamente y de salud estoy bien y afronto la carrera de forma muy similar al 2019. La estrategia es muy parecida: intentar hacer mi tiempo y una vez pasen 15 horas de carrera, ver si las piernas están preparadas para apretar al final e intentar acercarme al tiempo de 2019 o incluso bajarlo. El objetivo principal es ir a hacer mi tiempo. Es un objetivo viable entre 20 y 21 horas. En otros años con este tiempo se ganaba y este año con este tiempo creo que se hará un top 5 y es la idea. Mi idea es hacer entre 20:30 o 21 horas, ese sería un muy buen resultado".
El reto Breaking 20 que se marcó en época de pandemia sigue ahí, "si me va bien intentaré batirlo, tenemos los tiempos programados para poder hacerlo", pero en caso que no sea posible "estar entre las 20 o 21 horas y acabar entre los tres primeros sería un muy buen resultado". Hay que tener en cuenta que el podio, este año, estará carísimo. "Hay una lista de 30 corredores muy muy buenos que podrían estar perfectamente en un podio de cualquier carrera. Desde la salida el nivel será muy alto", advierte Capell, que tiene claros sus favoritos. "Para mí, Kilian Jornet y Jim Walmsley son los dos favoritos y después hay un grupo secundario de 30 corredores donde están Pablo Villa, Tom Evans, Hannes Namberge... Hay muchos y con muy buen nivel... Sé que es complicado, pero es una carrera muy larga y al final en ocasiones va por eliminación".
Rivales al margen, Capell tiene claro que el viernes tiene que disputar su carrera y ceñirse a sus sensaciones y los tiempos entrenados en el mismo Mont Blanc durante una semana y, también, en el trabajo que ha hecho en Andorra, buenos entrenamientos en altitud que sin duda le ayudarán en el reto mayúsculo y épico de buscar su segunda corona en la carrera de las carreras.