La reapertura del Everest, un momento clave para Nepal
Tal y como informa The Himalayan Times, apenas se ha cerrado la temporada postmonzónica en el Himalaya y los ‘icefall doctors’, los sherpas que abren y mantienen la ruta normal del techo del mundo –compartida con el Lhotse-, ya han empezado a trabajar. Se trata del primer otoño después del devastador terremoto que asoló Nepal la pasada primavera –con alrededor de 9.000 muertos- y que mató a 18 personas en Everest.
Los doctores de la cascada del Khumbu, situada entre el campo base y el C1 de Everest, han comenzado a diseñar y construir, con escaleras y cuerdas fijas, la ruta normal que asciende por la vertiente nepalí, el único acceso a la cima durante esta temporada ya que la vertiente tibetana está cerrada. La ruta empleada será la que se utilizaba en la década de los 90 y que se recuperó a inicios de 2015, después de que el año anterior un alud se cobrara la vida de 16 sherpas mientras equipaban la zona de la cascada.
Tan solo 3 cumbres en 15 años
Los fuertes vientos y bajas temperaturas, unidas a una menor actividad de las denominadas expediciones comerciales –que fijan cuerda y abren huella- hacen que sean pocos los alpinistas que se atrevan a atacar la más grande de las montañas en verano. En el recuento que ha hecho el periodista Stefan Nestler en su blog, desde el año 2000, solo tres equipos han conquistado la cumbre. Fueron las expediciones de los americanos Eric Larsen (2010) y Dave Hahn (2006), y el esloveno Davo Karnicar (2000).
Una rueda de prensa en la concesión del único permiso expedido
Por el momento, un equipo japonés compuesto por Nobukazu Kuriki y Masaru Kadotani ha confirmado que llegarán al CB el próximo 21 de septiembre –coincidiendo con el equinoccio de otoño-. Será el quinto intento al Everest para Kiruki, quien en otoño de 2012 perdió fragmentos de nueve dedos en la montaña en la montaña.
Las autoridades nepalís convirtieron la concesión del permiso en toda una celebración, con convocatoria a los medios incluida. "Kuriki está subiendo en un momento en que hay confusión en el mundo acerca de la seguridad en Nepal tras el terremoto", dijo el ministro de Turismo Kripasur Sherpa.
Nepal intenta levantar la cabeza
Es evidente que se trata de un momento clave para la recuperación del turismo de alta montaña, un sector que aporta el 4% del PIB del país. El trágico alud de 2014 y el derivado conflicto laboral con los porteadores ya dejaron tocado el turismo durante el pasado año, en el que algunas agencias decidieron cancelar sus expediciones comerciales en el Everest. Se calcula que el terremoto de abril rebajará en un 50% la afluencia de montañeros extranjeros a la zona.