Teresa Forn y Roberto Ruiz se proclaman Campeones de España de Raquetas de nieve
El II Campeonato de España de Raquetas de Nieve tuvo lugar en la Estación de Esquí de Aramón Cerler, Huesca, el 23 de febrero, con representantes de 9 federaciones autonómicas que disfrutaron de un itinerario de gran belleza con unas excepcionales condiciones de la montaña acompañadas del tiempo anticiclónico de todo el fin de semana.
El primer clasificado, Roberto Ruiz, de la Federación Cántabra, pasó la línea de meta con unos estupendos 57 minutos y 20 segundos, el segundo clasificado, el madrileño Alfonso Rodríguez, lo hizo 23 segundos más tarde, y cerró el podio masculino el valenciano Ignasi Cardona, Campeón de España de Raquetas de Nieve 2013, que entró 3 minutos y 39 segundos después del primer clasificado. Ya desde la salida se fueron dibujando estas posiciones, que se mantuvieron hasta la línea de meta. En la categoría femenina, la catalana Teresa Forn, experimentada corredora por montaña con una larga trayectoria a sus espaldas, hizo valer su experiencia y su estado de forma de comienzo hasta fin, entrando en solitario y poniendo nieve de por medio a sus perseguidoras con 12 minutos y 48 segundos de ventaja con respecto a la valenciana Mayca Sala, y con15 minutos y 26 segundos de la tercera clasificada, la aragonesa Vanessa Bataller.
A las 10:30 h de la mañana se dio la salida a la prueba popular de Raquetas de Nieve en motivo del Día del Raquetista, que congregó a un centenar de participantes, todos ellos siguieron el mismo itinerario que fue trazado y balizado para el Campeonato de España. Posteriormente, a las 12:30h se dio paso a la entrega de premios a los ganadores del Campeonato de España de Raquetas de Nieve a cargo de Gabi Mur, Director de la Estación Aramón Cerler, José Masgrau, Presidente del Club Montañeros de Aragón de Barbastro, Luis Masgrau, Presidente de la Federación Aragonesa de Montañismo y Joan Garrigós, Presidente de la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada.
Una jornada irrepetible
La prueba estuvo muy bien organizada por el Club Montañeros de Aragón de Barbastro, que gozó del soporte de la Federación Aragonesa de Montañismo y la colaboración inestimable de la propia estación de esquí, que puso las máximas facilidades para albergar esta prueba de gran nivel. El Club movilizó a varios voluntarios los días previos para contar con un itinerario de calidad acorde con el reglamento oficial de la FEDME y contó con la labor de 35 voluntarios más el mismo día de la prueba.
El Club Montañeros de Aragón de Barbastro y Aramón Cerler pudieron disponer y preparar de manera impecable un trazado de 8,2 km de recorrido y 705 m de desnivel positivo acumulado. La salida se situó en el centro neurálgico de la estación, en el Ampriu, a 1.912 m de altura, y el itinerario discurrió hacia el Collado de Bassibé, al que no se llegó para evitar la última pala y su nieve helada a 2.200 m de altura. El recorrido regresaba de nuevo a l’Ampriu hasta la cota 1.950 m, en donde se desvió camino del Pla de la Inllada y luego al Clot d’es Cardós, a 2.185 m de altura, para que después de este precioso y duro bucle regresar de nuevo a l’Ampriu, a 1.912 m, y cruzar la línea de meta, llena de público espectador. El itinerario gozó de dos avituallamientos líquidos y sólidos, el primero a los 3,8 Km de recorrido y el segundo y último en la misma llegada. Las condiciones de la nieve fueron óptimas para la práctica de las raquetas, especialmente para los competidores, que precisan dureza y compactado de la nieve para evolucionar rápidamente contra el cronómetro.
A las 8:55 h se realizó el control de material obligatorio por parte de los árbitros FEDME, justo en la línea de salida, y a las 9:00 h se dio puntualmente el pistoletazo que marcaba el inicio de la prueba con una temperatura ambiente de – 3ºC, cielo completamente despejado y sin viento. El sol que acudió por el este puntualmente suavizó la temperatura e hizo de la mañana una delicia para todos los competidores, público y numerosos controles repartidos por todo el itinerario. En definitiva, fue una jornada irrepetible con unas condiciones de la montaña excepcionales.
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