Tres razones por las que permanecer en el campo base
Hasta el momento, Moro y Göettler han escalado hasta los 7.000 metros. Asimismo, han logrado instalar una pequeña tienda de campaña en la C3, tal y como estaba planeado. Ahora dependen del pronóstico de Karl Gabl -siempre preciso-, que ya anticipaba el paso a la niebla y la lluvia de estos días.
La mañana del 31 de enero, hablaron con Tomasz por la radio: se encontraba en más allá del C2 y le alertaron de que una nevada que comportaba un fuerte viento. En un principio, pretendía resistir junto con su equipo hasta llegar a la C3 pero lo pensó dos veces hasta diagnosticar que era mejor quedarse donde estaban y no en la cresta bajo esas condiciones. Cuando el suelo está duro y helado y además, sopla un fuerte viento, es mejor no caminar ya que en el hielo negro los errores no están permitidos.
“Permanecer en el campamento base durante varios días seguidos requiere paciencia y equilibrio emocional. Resulta difícil permanecer motivados y concentrados en nuestro objetivo, aunque esperar y estar listos para el ascenso son las únicas cosas razonables que pueden hacerse en estas circunstancias. Para escalar una montaña como ésta en invierno tienes que ser rápido, sincronizarte con el buen tiempo y las condiciones de la montaña. Hay que tomar algunos riesgos controlados, pero no más de los necesarios. Al final, se trata de permanecer en la montaña el menor tiempo posible. La cantidad exacta de tiempo.”
“Escalar una montaña así puede sonar muy valiente y heroico. Además, puede que no cuadre con nuestra idea romántica del alpinismo pero esperar pacientemente en el campo base es exactamente lo que hay que hacer a veces. Después de todo, se supone que somos alpinistas, no héroes”, apuntaba Simone Moro en la web de The North Face.