Carlos Soria presenta su expedición al Kanchenjunga
Carlos Soria, líder de la Expedición BBVA, ha presentado en Madrid su próximo reto, coronar el monte Kanchenjunga (8.586 metros) en el que será su primer intento en la tercera montaña más alta del mundo dentro de su proyecto de convertirse en el alpinista de mayor edad en alcanzar los catorce picos más altos del planeta. Además ha presentado junto a Antoni Ballabriga, director de Responsabilidad y Reputación Corporativas de BBVA, los avances en el proyecto solidario que BBVA y ESADE están desarrollando en el pueblo de Sama, a los pies del Manaslu.
Carlos Soria ha presentado en Madrid la Expedición BBVA Kanchenjunga 2013, un paso más para conseguir cumplir el reto de este alpinista de 74 años de alcanzar las catorce cimas más altas del mundo. El Kanchenjunga (8.586 metros), junto al Dhaulagiri, el Annapurna y la cumbre principal del Shisha Pangma, son las cuatro cimas que restan para que Carlos Soria complete su proyecto. Carlos partirá el 22 de marzo a Katmandú acompañado por el médico Carlos Martínez, el alpinista Luis Miguel López, principal apoyo de Carlos para llegar hasta la cumbre, y Daniel Salas, cámara que registrará todos los pasos de la expedición.
Durante la presentación, Carlos ha declarado que se encuentra en mejor forma física que nunca. “Empecé a entrenarme el día siguiente de llegar del Dhaulagiri. He estado haciendo esquí de fondo en los Pirineos y escalada en hielo en Noruega, aparte de mi rutina diaria en la sierra de Madrid“, ha afirmado. Además, “para la preparación de este nuevo reto he contado con un entrenador que me ha dirigido durante estos meses para llegar con la mejor forma física que puede tener una persona de mi edad”, ha añadido el alpinista abulense.
Kanchenjunga, los cinco tesoros de las nieves
Éste será el primer intento de Carlos Soria para coronar la cumbre del Kanchenjunga (8.586 m), la tercera más alta del mundo por detrás del Everest y el K2, cimas ambas que ya holló en 2001 y 2004, respectivamente. No obstante, el montañero español conoce bien la zona desde su exitosa experiencia en el cercano Dome Kang (7.260 m), puesto que coronó este sietemil virgen en 2009 gracias a diez días de buen tiempo, lo que puede volver a ser clave a la hora de atacar la cumbre del Kanchenjunga. La expedición realizará una fase de aclimatación de aproximadamente quince días en el valle del Khumbu, en las cercanías del Everest, para posteriormente acudir al campamento base del Kanchenjunga.
Las peligrosas condiciones de la montaña han impedido al alpinista septuagenario culminar sus dos últimas ascensiones. Para Carlos, la principal ventaja de esta expedición es el cambio de zona: “Después de intentar el año pasado Annapurna y Dhaulagiri, hemos pensado que lo mejor era cambiar de valle. En esta zona el tiempo es más benévolo y no hay tanto riesgo de avalanchas, aunque el terreno es de igual dificultad”.
Tercera montaña más alta del mundo tras el Everest y el K2, el Kanchenjunga con sus 8.586 m es el pico más alto de India y el segundo más alto de Nepal. Kanchenjunga se traduce como "Los cinco tesoros de las nieves", ya que la montaña tiene cinco picos, cuatro de ellos por encima de los 8.450 metros. Este gigante indio-nepalí fue considerado fue considerado como la montaña más alta del mundo hasta 1952, cuando nuevas mediciones concedieron ese título al Everest.
La “15ª cima de Carlos Soria”
Durante la rueda de prensa, Carlos ha estado acompañado de Antoni Ballabriga, director de Responsabilidad y Reputación Corporativas de BBVA. Ambos han presentado la película sobre “la 15ª cima de Carlos”: Samagaon, población nepalí con la que colabora desde hace tiempo. ‘Sama, Proyecto Momentum Himalaya’, documental dirigido por Daniel Salas, explica la iniciativa con la que Carlos Soria junto a BBVA y ESADE, están desarrollando fórmulas que permitan financiar de forma sostenible la escuela local, que sirve además de alojamiento para unos 100 niños de la zona.
Como ha explicado Ballabriga, “en este momento, los esfuerzos de Momentum Himalaya se aúnan para buscar una iniciativa que permita derivar parte del beneficio que se genere hacia la escuela de Sama. De esta forma, se podría autofinanciar sin depender de las ayudas y donaciones que hasta ahora aseguraban su subsistencia”. En los últimos meses, varios técnicos se han desplazado a Sama y han identificado dos líneas de trabajo que podrían ayudar a la escuela: la ampliación un albergue para alpinistas y turistas que visitan la zona, muy en auge por las numerosas rutas de trekking que pasan por ahí; y la segunda es crear una cooperativa que permita vender la lana de yak de las familias de Sama a empresas textiles que elaboren productos de alta calidad con este material.