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Alex Txikon: “Queda suficiente invierno como para agotar nuestras posibilidades”

Bernardo Soto12/01/2012
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El alpinista Alex Txikon sale este jueves, junto al polifacético Carlos Suárez, rumbo a Pakistán, donde se juntarán con el resto de la expedición, compuesta por Gerfried Göschl, Darek Zaluski, Cedrik Hählen y Nissar Hussein. Juntos intentarán completar la vía iniciada el año pasado por Txikon, Göschl y el canadiense Louis Rousseau en el Gasherbrum I, para convertirse así en los primeros alpinistas en pisar dicha cima en invierno. Están siendo días de puesta a punto y mucho ajetreo para los expedicionarios, aunque Alex ha encontrado tiempo para atender brevemente a las preguntas de Outdoor Actual. Están son sus respuestas:

-¿Todo listo?
Pues espero que sí, porque están siendo días de locos. El otro día hicimos la rueda de prensa en Bilbo junto a Carlos (Suárez), con bastantes medios de comunicación, así que fue bastante bien. Y ahora nada, a empezar la expedición de verdad.

-Simone y Denis ya están en el Nanga Parbat, igual que los rusos en el K2. ¿Por qué habéis escogido esta fecha?
Bueno, es verdad que vamos más tarde que ellos, pero fíjate que el año pasado salimos el 23 de enero, 10 días más tarde que este año. Para nosotros tampoco es cuestión de llegar allí el primer día y chuparte todo el invierno. Todavía queda suficiente invierno como para agotar nuestras posibilidades.

-¿Cuál es el calendario previsto de la expedición?
El 13 nos juntamos todos los miembros de la expedición en Islamabad, ojalá tengamos suerte y volemos ese mismo día a Skardú. De todos modos, las fechas son imposibles de definir, sobre todo en invierno, cuando el mal tiempo te puede impedir despegar de Skardú. De todos modos, el objetivo, si todo va bien, es llegar al Campo Base entre el 21 y 22 de enero. A partir de ahí, la montaña y el tiempo marcarán nuestro ritmo.

-La expedición ha crecido bastante respecto a la del año pasado. ¿Cuál será la dinámica de trabajo en la montaña?
Pues al ser una expedición relativamente grande, los tiros pueden ir por hacer dos grupos de tres personas para trabajar la vía. Mientras unos van abriendo la vía, los otros estarán descansando o abasteciendo los campos inferiores. De todos modos, la manera de trabajar la condicionará también el estado de la montaña y del tiempo, así que ya veremos. Se puede entender que hemos dado un paso atrás en el sentido que las expediciones tienden a ser cada vez más ligeras y nosotros hemos hecho todo lo contrario. Pero bueno, sabemos que tenemos muy pocas posibilidades de hacer cumbre, así que hay que poner todos los medios a nuestro alcance.

-Más allá del punto adonde llegasteis el año pasado, ¿Tenéis claro por dónde sigue la vía o es toda una incógnita?
Está bastante claro por dónde hay que salir. Nuestra ruta es nueva en la pared, pero luego sale a un enorme plateau por donde ya ha pasado alguna expedición hace años. De todos modos, siempre nos puede sorprender, en los últimos metros de la pared o más adelante, alguna dificultad inesperada, pero en principio y a rasgos generales, está bastante claro por dónde tenemos que ir.

-¿De los polacos sabéis algo? ¿Ha habido comunicación?
Pues bueno, ya se sabe que no nos ha hecho mucha gracia que vayan, porque nosotros ya estuvimos el año pasado allí y se podría entender que hay un código no escrito de respetar cosas como esa. Yo creo que se sorprendieron el año pasado al ver cómo tres personas en estilo alpino llegamos al Campo III, a un día de la cima, y han pensado que no debe ser tan difícil. Pero bueno, allí estarán y compartimos permiso y Campo Base con ellos, así que no creo que haya problema. Habrá buen ambiente.

-Para acabar, Carlos Suárez es un consumado especialista en Salto BASE y a ti te hemos visto volando en las últimas semanas. ¿Alguna intención confesable?
No es el objetivo principal de la expedición, pero si encontramos alguna posibilidad, sobre todo Carlos, para saltar en invierno desde el GI o alguna pared cercana, pues se intentará aprovechar.

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