Ramon Julián se reivindica en el escenario internacional
A sus 33 años, Ramon Julián Puigblanque es el escalador más veterano, y el único español, con opciones de pelear por las máximas competiciones internacionales de Escalada de dificultad.
A pesar de que los jóvenes escaladores vienen pisando muy fuerte –cada vez empiezan a entrenar antes y más metódicamente, el de Manlleu (Barcelona) sigue compitiendo año a año con los escaladores más fuertes del planeta. El pasado sábado se hizo con su tercer Campeonato de Europa, después de los de 2004 y 2010.
Le pedimos que nos explicara qué sensaciones tuvo durante la prueba y la analizaba así: "La prueba la viví muy bien y con mucha motivación para conseguir el preciado título, pero sinceramente en las rondas clasificatorias no me he sentido nada bien a nivel de sensaciones y nada cómodo en las vías. Aún así, en la final, con más ganas, me sentí mucho mejor y pude luchar al máximo sin cometer ningún error."
Desde que en 2001, se hicieron con su primer doblete (Copa y Campeonato de España), este escalador de corta estatura (159 cm) se ha enganchado a eso de subir a lo más alto del podio. A nivel estatal, y a pesar de la aparición en los últimos años de otras jóvenes promesas, todavía ningún rival se acerca a sus impresionantes números: 10 Copa FEDME -en las que ha ganado 31 pruebas- y otros tantos Campeonatos de España.
A nivel internacional cuenta con una Copa del Mundo (2010) y dos Campeonatos (2007 y 2011) –además del Subcampeonato del pasado año en Gijón-, pero los malos resultados en la última Copa del Mundo parecían alejarle de esa élite en la que lleva más de una década instaurado.
La sexta plaza en la general fue su peor balance en la competición de la Federación Internacional de Escalada Deportiva (IFSC) desde 2006 y es que sólo consiguió subir al podio, como segundo, en la prueba Wuijang (China).
A pesar de ello, le preguntamos si le sorprendió la victoria y contestó tajante: "La verdad es que no, mi objetivo principal para este año era justo este Campeonato de Europa y he estado entrenando muy duro para ello, aunque las sensaciones no hayan sido muy buenas, realmente me sentía fuerte."
El catalán espera quitarse la espina este 2015, para el que se ha preparado concienzudamente. Ha cambiado su dieta y perdido peso y ha encadenado cinco novenos en la pretemporada. Se siente preparado y quiere seguir demostrando que, mientras pueda luchar por la victoria, seguirá entrenando y compitiendo con todas sus fuerzas.
Él mismo valoraba la pretemporada: "Cada año intento estar más fuerte, siempre he sido muy disciplinado y simplemente he seguido mis pautas de entrenamiento para elevar el nivel de forma. Creo que este año he tenido un pico de forma más fuerte que otros años anteriores."
Preguntado por los objetivos de este año tiene claro que ya ha logrado uno de ellos: "Uno de ellos era este (el Campeonato de Europa), y el siguiente más importante es la Copa del mundo, aunque también tengo objetivos en escalada en roca, como escalar alguna vía de 9b."
Al hablar de la competencia, tiene claro quienes son los más fuertes: "Hay unos cuantos, pero los más directos son Adam Ondra y Jackob Schubert que son los que más guerra dan."