El montañismo aragonés pierde en Riglos al histórico escalador Jesús Ibarzo
Jesús Ibarzo de 67 años de edad era un referente en el mundo de la escalada y del montañismo aragonés. Junto con su compañero de ascensiones, y también cuñado, Ursi (Ursicino) Abajo, se convirtieron en la cordada de referencia en Aragón, tras la desaparición de los míticos Alberto Rabadá y Ernesto Navarro. A pesar de su edad, el montañero estaba en plena forma, salía habitualmente a escalar y a practicar el montañismo y conocía perfectamente la vía en la que sucedió la desgracia.
El fatal accidente se produjo sobre las 12.20 horas, cuando Jesús Ibarzo y Ursi Abajo se encontraban escalando la que es la vía más clásica para acceder al Mallo Pisón, la Pany-Haus. Se trata de una chimenea muy famosa, relativamente sencilla y de 320 metros de altura. Cuando Ibarzo tenía la ascensión casi completada, por causas aún desconocidas se precipitó al vacío más de 20 metros, con la mala suerte de que quedó encajonado entre dos paredes.
La estrechez de la chimenea dificultó la operación de rescate, que se alargó hasta las 17.00 horas y que requirió la intervención de dos helicópteros, el de Benasque y el de Huesca, debido a la gravedad de las lesiones que sufría el escalador accidente y a la complejidad del lugar de la caída, ya que se requirió el empleo de la grúa que lleva el helicóptero con base en la capital oscense.
En el operativo intervinieron dos especialistas del equipo de Montaña del GREIM de Benasque, otros tantos de Huesca, y un médico y un enfermero del 061, más ambas tripulaciones. Ibarzo fue rescatado con vida y una vez estabilizado fue trasladado a Riglos, donde esperaba un helicóptero del 061 para trasladarlo a Zaragoza, pero lo delicado de su estado hizo preferible su traslado al Hospital de San Jorge de Huesca, donde falleció poco después de su llegada. Ibarzo sufrió politraumatismo, con traumatismo craneal, fractura de cadera y neumotorax en los dos pulmones.
Está previsto que esta mañana se le practique la autopsia y por la tarde sus restos sean trasladados a Barañáin, localidad navarra en la que residía actualmente con su familia y en la que se celebrará su funeral.
El mundo del montañismo aragonés se encuentra consternado y conmocionado por la desaparición de uno de los escaladores de referencia en Aragón. El presidente de la Federación Aragonesa de Montañismo, Luis Masgrau, señalaba de él y de su compañero inseparable Ursi abajo que, “asentaron las bases de la escalada hace 50 años, fueron pioneros y crearon cordadas magníficas”.
Información de Pirineo Digital