TEST: Tenzing llega para quedarse
Nunca he sido muy fan de las bebidas energéticas. De hecho, siempre las he tratado de evitar a toda costa. El principal motivo son por todos los productos artificiales y el sabor añadido que podemos encontrar en diferentes marcas. Pero cuando la bebida de moda en el Reino Unido me envió su producto decidí hacer una excepción.
El principal motivo resulta muy obvio: Tenzing es una bebida energética, pero no es como las demás, pues destaca por ser 100% natural. Es aquí donde se diferencia de las otras marcas, y en especial, por su sabor. Aroma muy fresco que resultó ser muy agradable y suave en el paladar. Su sabor a manzana nos hace recordar a una infusión.
Además de activar el cuerpo por su cafeína natural -lo probamos en actividad física y funcionó a la perfección- resultó ser muy fácil de digerir. De hecho, a diferencia de otros productos, Tenzing no te hace sentir con la sensación de “cuerpo pesado”.
Para terminar, el envase es perfecto: han clavado y adaptado el diseño del Everest en el recipiente. Nos transmite profundidad y estabilidad, y eso es gracias al estudio que han hecho del color. En relación calidad precio, dudo mucho que encontremos una bebida energética mejor que Tenzing (precio: 1,45 euros por una lata de 250 ml).
Recomendaría a todo el mundo al que le gusten las bebidas energéticas que se cambian a Tenzing, pues además de comprar un buen producto, estaremos colaborando en proyectos medioambientales, y esto, a día de hoy, es oro.