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Dura negociación para evitar el cierre de las escuelas de escalada de Granada

Redacción - @outdooractual21/08/2015
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Hace dos semanas nos hacíamos eco del comunicado de la Asociación de Escalada Sostenible en el que se denunciaba la amenaza de cierre de algunas escuelas granadinas. Ahora, es la Federación Andaluza de Montañismo (FAM) la que hace públicos los pasos que está dando para encontrar una solución favorable para el colectivo montañero.

“A principios de julio, conocíamos la intención de la delegación provincial de Medio Ambiente de avanzar en una regulación de la escalada en toda la provincia de Granada”, explican en su página web. La propuesta de regulación dista bastante, en criterios de la FAM, de ser una norma de consenso y, lejos de responder a los intereses de los escaladores, pone en seria duda la supervivencia de nuestro deporte. “En esas estábamos, cuando llegaron los rumores de que se habían iniciado la desequipación de vías de escalada en Las Zorreras Bajas (Loja). Se iniciaba así una desequipación muy agresiva en una de las escuelas referentes de Andalucía, retirando las plaquetas y destrozando los parabolts, con lo que se anulaba cualquier posibilidad de recuperar las casi 100 vías de escalada de los distintos sectores de Zorreras Bajas.”

En una reunión mantenida con la delegación de medioambiente, los técnicos aceptaron realizar una desequipación más respetuosa simplemente retirando las primeras plaquetas de cada vía y respetando los parabolts, en previsión de que algún día se puedan volver a escalar en la zona si desaparece la afección medioambiental.

También han mantenido algunas reuniones con ayuntamientos, que abren un panorama mucho más esperanzador para los escaladores. “En líneas generales los ayuntamientos contactados muestran gran interés por la escalada en sus respectivos términos municipales y se muestran colaboradores para favorecerla, máxime si este deporte puede convertirse en un motor económico de estos municipios. Siempre buscando la compatibilidad de la escalada con la conservación del patrimonio natural y cultural, un principio básico siempre presente en nuestra concepción de la escalada.”