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El Melloblocco llegó a Val Masino para quedarse

Redacción OutdoorActual07/05/2012

A pesar de la lluvia, el Mellobloco volvió para demostrar que es principal encuentro de bulder del planeta. 2200 escaladores participaron en este evento. El triunfo deportivo fue en esta novena edición para Shauna Coxsey, Michele Caminati, Anthony Gullsten y Alexey Rubstov.

El sol que había iluminado las rocas durante las dos primeras jornadas del evento desapareció el sábado y domingo, dando paso a la lluvia. Sin embargo los escaladores estuvieron a la altura y, a pesar de la climatología, se pudieron ver problemas de bloque de gran calidad. Ejemplo de ello fue el ruso Alexey Rubstov que completó bajo la lluvia Ombre Multidimensionali.

Pero las jornadas requerían más actividades al margen de los mojados bloques. El techo del rocódromo situado en el gimnasio fue el escenario donde Ramón Julián o Sasha DiGiulian hicieron las delicias de los allí presentes. También se dejaron ver gran cantidad de escaladores convertidos en funámbulos encima de sus "slacklines", senderistas con ganas de conocer Val Masino y espectadores hambrientos de espectaculares vídeos de escalada. Todo ello antes de que llegara la velada nocturna, gracias al ritmo de Vallanzaska que continuó hasta bien entrada la noche.

En lo deportivo, la joven escaladora británica Shauna Coxsey resultó la vencedora en la categoría femenina tras completar cinco problemas de máxima dificultad. Por detrás de ella la austriaca Barbara Zangerl y las rusas Ekaterina y Iakovleva que se quedaron en cuatro. El triunfo masculino tuvo que ser compartido por tres escaladores, el local Michele Caminati, el finés Anthony Gullsten y el zar Alexey Rubstov con tres problemas resueltos.

El domingo por la tarde el Melloblocco 9 llegó a su final. Queda atrás una edición marcada por el agua en la que los escaladores han mostrado su perseverancia y ansias de participación. La excelente acogida de esta edición, a pesar de la mala previsión meteorológica, presagia un décimo aniversario de infarto. Y es que, el Melloblocco ha llegado a Val Masino para quedarse.