Un plan de acción basado en la sostenibilidad para Ordesa-Viñamala

El plan de acción de Ordesa-Viñamala ha comenzado a definirse en la primera reunión oficial que ha celebrado el Consorcio tras el nombramiento de su presidente, Miguel Villacampa, alcalde de Torla, y su vicepresidente, Luis Estaún, alcalde de Biescas. En el encuentro también se han aprobado los estatutos de funcionamiento del organismo y se ha procedido a elegir y nombrar al gerente y secretario del mismo.

Con la reunión, celebrada en Hoz de Jaca, se ha comenzado a trabajar en la Reversa y por ello una de las primeras medidas ha sido estudiar el presupuesto preciso que se va a destinar a plan de acción de 2014, basado en iniciativas de conservación, educación, investigación, divulgación y promoción interna del espacio.

Entre las primeras actuaciones que se han definido cabe destacar la realización de un plan de señalización, la celebración de una sesión informativa para presentar la reserva en cada uno de los ayuntamientos de la zona e iniciar un proceso de participación ciudadana para recabar propuestas y sugerencias pata el futuro Plan de Gestión de la reserva, que según el departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, “ya ha comenzado a elaborarse”.

Cabe recordar que el mientras el Gobierno aragonés se hará cargo del presupuesto destinado a la gerencia y al funcionamiento de la oficina, serán los ayuntamientos integrados en la reserva los que asuman la financiación de las primeras acciones. Por ello, el director general de Conservación del Medio Natural del Gobierno de Aragón, Pablo Munilla, que también acudió a la reunión, destacó que en el encuentro “se ha visto có0mo la administración local de la reserva ha tomado las riendas asumiendo las primeras decisiones y poniendo en marcha un plan inmediato”.

Diploma acreditativo
En el encuentro también se dio a conocer que el Consorcio ya ha recibido por parte del Organismo Autónomo de Parques Nacionales (OAPN) el diploma acreditativo otorgado por la UNESCO tras la ampliación de la reserva que se aprobó el pasado mes de mayo y por la que el espacio duplicó su tamaño, pasando de las 51.396 hectáreas a las 117.364. Esta ampliación supone “un reconocimiento del interés científico de estas zonas y la necesidad de realizar políticas específicas que contribuyan a la conservación y protección de las biodiversidad, el desarrollo económico y humano de estas zonas, la investigación, la educación y el intercambio de información entre las reservas”, recuerdan desde el ejecutivo aragonés.

Asimismo, el Gobierno de Aragón destaca que la constitución del Consorcio posibilita, entre otras cosas, “la implicación en la gestión de la reserva de las administraciones estatales, autonómicas y locales involucradas”. Que serán, precisamente, quienes garanticen, junto con otros agentes de la zona, el desarrollo adecuado de las estrategias y líneas de acción del Programa MaB (Man and Biosphere) de la UNESCO, en el que se incluyen actuaciones de convivencia entre la conservación del medio ambiente y el desarrollo económico y humano sostenible de la zona.

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