118 Studio diseña B-Step, un nuevo espacio de coworking en Barcelona
El proyecto B-Step, dirigido a startups con actividad en el sector deportivo y salud, recrea la atmósfera de un gimnasio. Un espacio de coworking diseñado por 118 Studio que impulsa el Ayuntamiento de Barcelona, a través de Barcelona Activa. Para acogerse al programa B-step, las empresas de reciente creación deben tener una idea o alguna característica innovadora en materia de deporte.
El programa B-Step consta de dos fases claramente diferenciadas. La primera de ellas, denominada Bootcamp, tiene como objetivo trabajar la definición del modelo de negocio y presentación del proyecto. La segunda, consiste en la ‘incubación’ de startups, durante ocho meses, en un espacio coworking que se ofrece de forma gratuita. Durante este periodo de tiempo, los proyectos participantes recibirán asesoramiento personalizado, formación, participación en actividades de networking, relacionadas con el ecosistema deportivo, para promover sinergias y cooperación con el objetivo de fortalecer las startups.
Para crear este nuevo espacio, el Ayuntamiento de Barcelona confió en 118 Studio, para construir este coworking. Situado en el edificio Incubadora Almogàvers, cuenta con dos espacios de 95m2 cada uno, además de zonas comunes.
Diseño de una instalación deportiva
El objetivo es crear un ambiente colaborativo que fomente la creatividad y el espíritu deportivo, a la vez que tecnológico. Este último aspecto es vital, ya que las startups participantes se dedican a actividades como Wereables, E-sports, formación Digital/Coaching, Fantasy Sports, Marketplaces deportivos, Software y apps de datos de actividad física.
El reto consistió en unificar, en una misma atmósfera y estilo, los espacios del módulo 104 y 105, respectivamente, situados en la primera planta del edificio. Para ello, se propuso comunicar los ambientes, a través de una pasarela elevada que simulara una pista de atletismo, y, a su vez, recreara un espacio deportivo.
Para dar continuidad, todo el pavimento está revestido en color amarillo intenso con una señalética en negro muy marcada. El conjunto aporta al recinto sensación de energía, creatividad y entusiasmo.
El equipo de 118 Studio también creó espacios compartidos excepcionales. Con un aspecto vanguardista, innovador y muy confortable, las salas de trabajo facilitan el coworking y las relaciones interpersonales.
Se plantearon veintiséis puestos de trabajo con mesas diseñadas por 118 Studio, fabricadas a medida y dotadas de corriente eléctrica que incorporan accesorios tecnológicos como USB o cargadores inalámbricos.
Las paredes de los módulos, en color negro y blanco, introducen mensajes e imágenes corporativas del programa en tonos pastel. Se instalaron también elementos como espalderas, barras de ejercicio y un banco tipo ‘potro’, a modo de sillón lúdico, que se combinan con taquillas y pizarras, para recrear una instalación deportiva.
Debido a la importancia de estar en contacto con la naturaleza, se han introducido, como elementos biofílicos, pequeñas áreas de jardín vertical. Las plantas tienen un efecto positivo en las personas, ya que contribuyen al estado de ánimo y a la socialización, gracias a los espacios verdes.
Finalmente, para culminar el proyecto, 118 Studio habilitó un rincón de relax y de descanso, situado en las zonas comunes de la primera planta. Está compuesto por una butaca XL, una mesa de apoyo y dos puff tapizados en azul intenso, de la colección Buddy de Pedrali.