6 tips para mantener la mampara de baño bien limpia
El mantenimiento de las mamparas y separadores de baño es fundamental para evitar la proliferación de bacterias y conseguir que la estancia luzca como nueva. Son uno de los elementos para el baño más demandados ya que son más seguros, duraderos, de más calidad y más limpios que las cortinas de baño.
Para que los usuarios conozcan los consejos para mantener adecuadamente estos productos, Duscholux ha elaborado una lista gracias a los tips recibidos a través de las redes sociales para evitar la formación de suciedad y conseguir que la mampara luzca impecable.
- Quitar el agua acumulada: una de las primeras medidas que se deben tomar para mantener la mampara en perfecto estado es quitar el agua y los restos de jabón del vidrio tras su uso. Para ello, se debe usar una espátula limpia-mamparas que permite retirar todo exceso de agua y geles. De esta manera se evitará que queden pequeñas gotas y restos incrustados en el vidrio.
- Ventilación: puedes prevenir la acumulación de humedad con una correcta ventilación. Si tu baño tiene una ventana exterior, ábrela después de ducharte así evitarás la formación de moho. Si por el contrario, no tiene salida al exterior deberás valorar la instalación de un extractor de baño que se convertirá un elemento imprescindible para que no se acumule la humedad en la estancia y estropee tanto la mampara como los muebles.
- Tratamientos industriales: uno de los mejores recursos para evitar la formación de cal son las soluciones que se aplican en mamparas y separadores, como Duscholux CareTec Pro. Estos sistemas, que se aplican durante la fabricación, evitan la formación de cal en los vidrios. Además, esta protección facilita un 80% la limpieza de la superficie.
- Seguir con la rutina de limpieza habitual: aunque se tomen estas medidas, se debe seguir una correcta limpieza tanto del plato de ducha como de la mampara (y de todo el baño) cada tres días. De este modo, se conseguirá una estancia en perfectas condiciones, limpia y sin bacterias.
- Malas prácticas: no se deben utilizar aplicadores abrasivos como estropajos, trapos y esponjas, tampoco productos de limpieza que no sean de PH neutro como: disolventes o elementos descalcificantes, lejía, salfumán, amoníaco o cualquier producto considerado químicamente corrosivo. Su composición hace que se dañen y provocan el envejecimiento prematuramente de los perfiles, las placas, las piezas, las superficies acrílicas y los junquillos de plástico.
- Tener la mampara adecuada: para conseguir que luzca impecable, debemos tener en nuestro baño el producto ideal según el espacio disponible. Con una mampara adaptada a las medidas disponibles, se evitará que se filtre el agua y se estropeen las siliconas o los perfiles.