Proyecto de interiorismo

Restaurante Latteria en Londres

Vudafieri-Saverino Partners12/11/2019

El estudio de arquitectura italiano Vudafieri-Saverino Partners ha diseñado un nuevo local en el vibrante distrito de Islington en Londres: Latteria, un restaurante inspirado en el Milán de los años 50, recordando el ambiente de las tradicionales 'tiendas lácteas' milanesas, con un toque contemporáneo y ecléctico.

La tradición de Milán llega a Londres. Vudafieri-Saverino Partners ha diseñado el café italiano 'Latteria' que acaba de abrir en el distrito de Islington, un área que ha experimentado un auténtico renacimiento en los últimos años, gracias también a una floreciente escena gastronómica.

El estudio de arquitectura con sede en Milán y Shanghai, autor de algunos de los restaurantes más modernos de Milán (Spica, Il Luogo di Aimo e Nadia, Peck CityLife, Berton, Dry...), ha llevado toda su experiencia a Londres. Inspirado en la cultura y el estilo milaneses, el restaurante reinterpreta en una clave contemporánea el encanto de las antiguas latemia (tiendas de lácteos): lugares donde se pueden comer platos auténticos y caseros, en un contexto auténtico y tradicional.

El resultado es un ambiente ecléctico en el estilo de los años 50, caracterizado por un ambiente cálido e informal. La oferta gourmet incluye platos saludables inspirados en la tradición: desde pastas caseras, risottos y pizza, hasta sándwiches y ensaladas, elaborados con experiencia culinaria italiana.

Proyecto interior

El proyecto interior, presentado en dos niveles en Essex Road, destaca por el fuerte impacto visual de sus interiores, donde los detalles son los verdaderos protagonistas. Las mesas de formica con marcos de aluminio, mostradores de zinc, suelos de baldosas, ladrillos vistos y lámparas colgantes en forma de moldes de postre, son los elementos que le dan personalidad al ambiente.

Dos colores caracterizan el espacio: blanco cálido, que recuerda el color de la leche y rojo, un tono que caracteriza también la fachada exterior. Los materiales se remontan a la década de 1950: superficies en laca semibrillante y laminadas, acero pulido y satinado, zinc... Mientras que la planta baja se distingue por su ambiente animado y'deli-counter' el piso inferior ofrece un espacio más íntimo, con un acogedor comedor aislado del bullicio.

El exterior del restaurante recuerda las ventanas de aluminio de los años 50. Su color rojo brillante, los letreros que se destacan como ventanas emergentes y las grandes ventanas que dirigen la luz hacia el restaurante, captan inmediatamente la atención de los transeúntes. La entrada se ve acentuada por dos paredes curvas en vidrio que marcan un pequeño vestíbulo.

Una cortina semicircular actúa como una cortina para el espectáculo que comienza una vez que se entra al restaurante: a la derecha, los huéspedes son recibidos por una barra de bar cubierta de zinc, donde pueden tomar un café de pie, según la tradición italiana. Continuando dentro, un segundo espacio completamente dedicado a la exhibición de platos atraviesa la sala. En la pared opuesta a la entrada, las escotillas permiten echar un vistazo a la cocina.

La zona del restaurante se divide en tres salas. La primera, en el mismo nivel de la entrada, tiene bancos de cuero ecológico típicos de los años 50. Unos pasos conducen al salón, donde un gran banco de terciopelo marca el perímetro. En el piso inferior, las paredes de la habitación están cubiertas con papel pintado de vinilo rojo, interrumpido por dos vitrinas de vidrio, que pueden encenderse con los elementos que contiene. En todo el restaurante hay estantes y armarios, en el estilo lácteo de los años 50, diseñados para exhibir pastas, aceites, encurtidos, vinos y otros productos.