Una jornada en Pamplona subraya el potencial de la industrialización como herramienta para una arquitectura de calidad
Este es el objetivo subyacente en la jornada ‘Industrialización. Por una Industrialización con calidad arquitectónica’, celebrada en la sede del Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro (COAVN), en Pamplona. La sesión forma parte de la iniciativa ‘Construir en clave sostenible’, impulsada por el Observatorio 2030 del Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España y Saint-Gobain, y contó con el apoyo del Fundación Building & Architecture Institute (BAI) y el Clúster de la Industrialización de la Construcción de Navarra (iCONS).
La apertura institucional del acto corrió a cargo del decano del Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro (COAVN), José María González Pinto; el presidente de la Delegación de Navarra del COAVN, Santiago Iribarren Santesteban; la vocal adjunta de la Junta de Navarra del COAVN, Iosune Baquedano; y el secretario general del CSCAE, Laureano Matas.
En su intervención, el decano del Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro (COAVN), José María González Pinto, resaltó que “la construcción industrializada, además de contribuir a la sostenibilidad, a la seguridad y a la eficiencia, puede y debe favorecer la excelencia arquitectónica. En esta jornada hemos escuchado diferentes voces y casos de éxito que han puesto de manifiesto que la industrialización debe concebirse como una herramienta al servicio de una buena arquitectura. Y esa buena arquitectura es el mejor servicio que los arquitectos podemos dar a la sociedad”.
Sobre los beneficios de la construcción sostenible, la directora del Observatorio 2030 del CSCAE, Mari Ángel López Amado, explicó que “la industrialización es un proceso que todavía está escasamente implementado en el sector de la edificación en nuestro país: entre el 1-2%, frente a otros países europeos como Países Bajos -50%- o Suecia -10%-. Sin embargo, supone una oportunidad para reforzar nuestra cadena de valor, ya que puede ofrecer un nexo de unión sólido entre el diseño arquitectónico de calidad, que garantiza el bien común, y su ejecución, ya que exige un trabajo coordinado, desde el inicio del proceso, entre los profesionales de la arquitectura, los fabricantes y las empresas constructoras. Uno de los objetivos de la construcción sostenible es que minimiza el impacto en el medioambiente, puesto que emplea materiales eco-amigables, la eficiencia energética y la gestión sostenible del agua, entre otros aspectos”.
Proyectos en Navarra
Las distintas ponencias de la jornada exploraron cómo conciliar eficiencia constructiva y excelencia en el diseño, garantizando entornos habitables, sostenibles y visualmente enriquecedores. En ese sentido, se presentaron casos de éxito en la construcción industrializada en Navarra, como los proyectos de 1.763 viviendas impulsados en el marco del Plan Vive presentado por el Grupo Avintia; las 39 Viviendas Entremutilvas; los módulos residenciales del Centro de Educación Especial Isterria; la implementación de baños industrializados en una promoción de VPO, y SEI, un nuevo sistema de estructura para la construcción industrializada en el ámbito urbano.
El Centro de Educación Especial Isterria, uno de los proyectos sociales de la Fundación Caja Navarra, dirigido a la atención de alumnos con necesidades educativas especiales, dispone de una residencia escolar con siete viviendas. Según explicaron los arquitectos y socios directores de ByE Arquitectos, Javier Barcos Berruezo y Manuel Enríquez Jiménez (este último, presidente también de la Asociación Sostenibilidad y Arquitectura), la particularidad del proyecto reside en que hay que renovar cuatro viviendas en un periodo de diez semanas (70 días) en dos fases, entre los días del 22 de junio al 31 de agosto de los años 2024 (ya realizada) y 2025. Esto exige demoler la edificación existente y sustituirla por una nueva -de unos 450 m2 construidos- completamente terminada y operativa.
Durante la presentación del proyecto de 1.763 viviendas del Grupo Avintia, impulsado en el marco del Plan Vive Culmia (Madrid), el director de Construcción Industrializada en Ávita (Grupo Avintia), Francisco Nisa González, detalló las ventajas de un sistema industrializado, destacando el proceso de fabricación 100% automatizado y digitalizado, la reducción de un 30% del plazo de ejecución, la estandarización del producto, la eficiencia energética y economía circular, el trabajo colaborativo entre todos los agentes implicados, la mejor eficiencia de coste y la ingeniería de valor.
Con respecto al proyecto de implementación de baños industrializados en una promoción de VPO, el arquitecto Mikel Zabala Iraurgui, de AA Arquitectos Asociados, comentó que la introducción paulatina de elementos industrializados en “nuestros proyectos es un reto que los arquitectos tenemos que afrontar y con el que nos vamos a encontrar con mayor frecuencia cada vez”.
Los desafíos de la industrialización
Durante la jornada, diferentes expertos analizaron los desafíos de la construcción industrializada con acciones reales y concretas en Navarra. Entre ellos, el arquitecto y patrono de la Fundación Arquitectura y Sociedad, Patxi Mangado; el coordinador del Grupo de Trabajo de Industrialización del CSCAE, Josecho Vélaz Ballesteros, y el gerente de Erro y Eugui, Iñigo Eugui Martínez de Azagra.
El coordinador del Grupo de Trabajo de Industrialización del CSCAE, Josecho Vélaz Ballesteros, señaló que la escasez de mano de obra y su falta de cualificación provoca un momento de bloqueo ante la necesidad de la realización de nuevas viviendas a costes razonables. Ante este escenario se mira a la industrialización como una solución. Sin embargo, lamentó que, incluso desde dentro del propio sector, se está formulando sin un análisis amplio y riguroso de los innumerables antecedentes.
Por su parte, el gerente en Erro y Eugui, presidente de iCONS y patrono de BAI, Iñigo Eugui Martínez de Azagra, profundizó en los retos de la industrialización, explicando que carece de una definición aceptada por todos los agentes implicados y que, por tanto, no está ni tipificada ni normalizada. De ahí las discrepancias en cuanto a sus ventajas y dimensiones.