El elefante es el otro animal de Funny Farm que hemos elegido para convertirlo en una escultura de luz. Como todos los elefantes, tiene grandes orejas, trompa, incluso sus propias patas, y un cuerpo de más de metro y medio de altura.
Para convertir la visión de Isidro Ferrer en una lámpara a gran escala, LZF ha vuelto a recurrir a la experiencia del artesano Manolo Martín.
Al igual que hizo con Fish, Manolo utilizó la técnica de la vareta para dar forma a las tres esferas que constituyen el cuerpo y la cabeza de Elephant. Su corazón luminoso, en el centro de la escultura, se difunde a través de un revestimiento interior de chapa de madera natural.