Rehabilitación energética y funcional de edificio en calle Carlos Picabea 1 en Torrelodones (Madrid)

El cambio de ventanas, puertas y cerramientos en fachadas en los edificios mejora la eficiencia energética de estos. La rehabilitación energética en los edificios públicos es uno de medios más difundidos para promover la mejora energética y medioambiental exigida según la agenda 2030 del desarrollo sostenible.

Desde Vivendio queremos presentar a los lectores de la revista iArqco un proyecto que hemos desarrollado de la mano del Ayuntamiento de Torrelodones, cuyo redactor del proyecto ha sido Ignacio Rodríguez Urgel, agradeciendo de antemano la predisposición de ambos al buen desarrollo y fin de las actuaciones ejecutadas.

Antes de acometer los trabajos proyectados, el edificio disponía de dos accesos, uno en planta baja y un segundo a través de un vestíbulo que comunica con el resto de las plantas, a través de un núcleo de comunicación vertical. El edificio que se encuentra en un estado de conservación aceptable, pero obsoleto, exigía una renovación funcional y de acabados adaptados a la normativa existente y mejora energética vinculada con la eficiencia y sostenibilidad.

El objetivo de la actuación era dotar al edificio de una distribución que permitiera adaptarse a los diferentes usos que puedan surgir de tipo dotacional e institucional, aplicando soluciones constructivas que facilitaran las diferentes distribuciones y que no implicaran obras complejas. La solución adoptada para las zonas de trabajo consistió en una redistribución de los espacios obteniendo salas más amplias y acordes con las necesidades de los usuarios.

El objeto principal de la actuación, como hemos comentado, es la rehabilitación energética del edificio, mejorando las condiciones de aislamiento de la envolvente y modernizando las instalaciones de electricidad, iluminación, climatización, fontanería y saneamiento que, junto con la instalación de paneles fotovoltaicos en su cubierta, se consigue un ahorro energético considerable en el conjunto. Se aprovecha la rehabilitación para adaptarse a la normativa, mejorando la accesibilidad al edificio, adaptando los aseos a las personas de movilidad reducida y sectorizar el edificio para cumplimiento del PCI.

Entrando en detalle sobre los sistemas envolventes llevados a cabo, la actuación sobre las fachadas se realiza sin modificar los elementos de cerramiento, colocando un aislamiento térmico por el exterior de la fachada existente y la instalación de dos tipos de revestimientos:

1. Fachada ventilada con junta abierta de 8 a 12 mm con paneles arquitectónicos de fibrocemento (cemento/fibras). Se instaló sobre una subestructura metálica de aluminio con tratamiento térmico y una distancia de separación entre perfiles de 60 cm.
2. Fachada ventilada de acero corten con chapa de 4 mm de espesor sustentada a una subestructura de acero formada por perfiles verticales.

Para la elección del sistema de fachada más adecuado, se tuvo en cuenta la zona climática, el grado de impermeabilidad, la transmitancia térmica, las condiciones de propagación exterior y de resistencia al fuego, y las condiciones de seguridad de utilización en lo referente a los huecos. Previo al montaje de la fachada ventilada se trató el cerramiento con un revestimiento con mortero monocapa de 10 a 15 mm de espesor.

Se utilizaron diferentes tipos de aislamientos por sus características, aplicación en fachada y en cámara interior generada por el trasdosado de yeso:

• Aislamiento térmico por el exterior de cerramientos con paneles de lana mineral hidrofugada con velo de 60 mm de espesor.
• Aislamiento térmico por el exterior de cerramientos con paneles de poliestireno expandido (EPS) de densidad 25 kg/m3 machiembrados de 50 mm de espesor.

Las carpinterías de las ventanas exteriores existentes se sustituyeron por unas nuevas de aluminio con rotura de puente térmico y transmitancia térmica máxima de 0,80 W/m²K. El acristalamiento proyectado el doble tipo climalit y espesor dependiendo de su ubicación y altura, de tal manera que en ventanas de planta alta se forman por un vidrio exterior en sustrato incoloro de 6 mm con capa de baja emisividad y vidrio interior de 4 mm, separador por cámara rellena de gas argón de 16 mm de espesor; y en ventanas de planta baja se forman por un vidrio exterior laminar de dos vidrios flotados en sustrato incoloro de 4 mm unidos mediante un PVB de 0,38 mm de espesor total y vidrio interior laminar de dos vidrios flotados en sustrato incoloro de 4 mm, separados por cámara rellena de gas argón de 16 mm.

Respecto a las puertas instaladas se utilizaron puertas de paso corredera de una hoja ciega de madera lacada lisa en aseos en block, revestidas con corcho al exterior y panel fenólico hidrofugado al interior. En los accesos a las zonas de trabajo se instalaron puertas metálicas cortafuegos de 2 hojas iguales formadas por marco en chapa de acero galvanizado, junta intumescente alrededor del marco y cámara intermedia rellena de material aislante ignifugo, tipo lana de roca de 55 mm de espesor. La puerta de salida directa del local de planta baja a calle fue metálica cortafuegos de una hoja formada por marco en chapa de acero galvanizado de 1,5 mm de espesor, junta intumescente alrededor del marco, hoja de puerta construida por 2 bandejas de chapa de acero galvanizado de 0,6 mm de espesor y cámara intermedia rellena de material aislante ignífugo, tipo panel lana de roca de 55 mm de espesor (160 kg/m²), lacada al horno en color blanco.

Como complemento a las medidas adoptadas para la mejora de la eficiencia energética del edificio, la rehabilitación practicada se suplementó con la mejora y adaptación a normativa según el Código Técnico de la Edificación, de las instalaciones de electricidad e iluminación con tecnología LED, instalación de ventilación mediante un recuperador de calor por planta y climatización mediante un sistema VRF a dos tubos para conseguir un ambiente climático de confort en las distintas zonas en que se divide el edificio tomando como referencia la exigencia de bienestar e higiene del RITE IT de calidad térmica del ambiente y de calidad del aire interior, y un nivel sonoro por debajo de los 30 dB en todo el edificio, y la instalación de un sistema de regulación y control para controlar en todo momento los parámetros de temperatura, humedad y concentración de CO₂ para actuación sobre los equipos de aire primario y climatización.

Una vez más, desde Vivendio Sostenibilidad Energética SL se contribuye, a través de estas actuaciones, a rehabilitar energéticamente un edificio que, de partida, tenía unas carencias energéticas significativas y transformarlo en un edificio con una calificación energética acorde con las pretensiones europeas de minimizar el consumo de energía primaria y hacer más eficientes y sostenibles el parque edificatorio que España tiene que acometer en los próximos años.