La fábrica contará con una superficie construida de 13.000 m², una inversión de 18 millones de euros y estará operativa a finales del 2026
K·Line anuncia la construcción de una nueva fábrica en España
Bruno Leger y Jean-Pierre Liébot, director general y presidente del Grupo Liébot, respectivamente, comunicaron el pasado 21 de marzo la apuesta del grupo francés por una nueva unidad productiva destinada a la fabricación de puertas y ventanas de aluminio para el mercado ibérico, coincidiendo el 25º aniversario de la llegada de K·Line a España.
La nueva fábrica estará ubicada en Lliçà de Vall, Barcelona, y contará con dos superficies productivas (13.000m² en planta baja más 7.000m² en el piso superior) que permitirán triplicar la producción actual.
El anuncio llega tras un ejercicio de récord en el Grupo Liébot, con una facturación global de 860 millones de euros (+11,7%) en 2023.
En palabras del director general de K·Line España y Portugal, Juan Carlos Castaño, “esta nueva fábrica constituirá un punto de inflexión para el crecimiento de la empresa, que no solamente permitirá aumentar su producción, sino que será una fuente de riqueza y empleo en la zona, con unas instalaciones de vanguardia como referentes del sector. Este hito no hubiera sido posible sin la confianza de la familia Liébot, de todos los empleados y de nuestros clientes y proveedores”.
Juan Carlos Castaño, director general de K·Line España y Portugal.
Con 13 empresas, 13 fábricas, 3.700 empleados y presencia en 5 países, el Grupo Liébot sigue con su expansión internacional tras la adquisición del 60% del capital de la empresa alemana PaX, que facturó 70 millones de euros en 2023 (cifra no incluida en sus resultados globales).
Un desarrollo sostenible, la clave para un futuro neutro en carbono
Grupo familiar, responsable y comprometido con la descarbonización de su sector, la compañía continúa el despliegue de Planet, su plan de transición ambiental con el objetivo de alcanzar una trayectoria baja en carbono del -30% en 2030 y del -80% en 2050. Para lograrlo, la familia Liébot ha puesto en marcha el proyecto de la fábrica Coralium con la colaboración de la familia Corre y valorado en 42 millones de euros.
La fábrica clasificará y procesará los tres tipos de residuos de aluminio para producir tocho de aluminio puro, desde restos de producción a aluminio al final de su vida útil, logrando así una economía circular. Dicho centro será capaz de fabricar 40.000 toneladas de tocho de aluminio, cumpliendo con los objetivos marcados dentro del plan Planet. La fábrica entrará en funcionamiento en el otoño de 2024 y la primera fundición de aluminio está prevista para enero de 2025.
El Grupo Liébot también está acelerando su producción fotovoltaica en sus distintas instalaciones. De aquí a 2025, el Grupo dispondrá de 29.200 m2 de paneles fotovoltaicos, correspondientes a una potencia instalada de 5.775 kWp, de los cuales 17.500m² son en propiedad, es decir, una potencia de 3.521 kWp. Cada kWp instalado produce entre 1.000 y 1.200 kWh de electricidad al año. La inversión del Grupo en este ámbito asciende a 6 millones de euros.
Además, el Grupo apuesta por la reducción y la reutilización de los envases que recoge de sus clientes y pretende eliminar el plástico no recuperable. El reciclaje es un objetivo imprescindible para K·Line, que ha comenzado a desplegar la recuperación de todos sus embalajes para su reutilización.