Soenen Hendrik desarrolla líneas de producción automáticas diseñadas a medida para cada cliente
Cuando una empresa tiene que invertir en nueva maquinaria, no siempre tiene que mirar hacia el extranjero para hacer sus adquisiciones. Este ha sido el caso de la empresa belga Lammertyn, especializada en la fabricación de barandillas y portones, que ha confiado en su compatriota Soenen Hendrik para incorporar una línea de producción totalmente automatizada.
La incorporación de esta nueva línea permite a Lammertyn liberar dos operarios en la sección de procesado de perfiles para emplearlos en otras tareas del proceso de producción. Con la nueva maquinaria tan solo basta con colocar los perfiles en el almacén de entrada y, a continuación, la misma máquina se encargará de procesarlos de manera rápida y automática. Al permitir una fabricación no pilotada, la eficiencia y la producción aumentan también de forma considerable.
Las líneas de producción automática de Soenen Hendrik facilitan las labores del procesado de perfiles.
Lammertyn hace casi 35 años que se dedica a la fabricación de barandillas y portones para clientes profesionales. Así, los promotores de edificios pueden elegir entre unos quince modelos estándar, aunque también es posible entregar trabajos personalizados. “Todo lo fabricamos en casa, lo que nos permite trabajar de manera flexible. Contamos con una oficina de ingeniería interna, un taller con trabajadores experimentados, un avanzado parque de máquinas y de equipos de ensamblaje”, explica Krist Lammertyn, quien con su esposa Saskia está evolucionando la creación de su padre Roger.
Fruto de este constante desarrollo, la firma mantiene una continua inversión en personas, máquinas e instalaciones, como un nuevo almacén de perfiles de 1300 m2, con una altura de 16 m, así como un almacén vertical automatizado para almacenar piezas pequeñas y productos de mantenimiento.
Con el fin de optimizar todavía más su planta de producción, la firma empezó a buscar un nuevo centro de mecanizado que cumpliera con sus necesidades actuales y futuras. Para ello, Krist Lammertyn y su equipo estudiaron diversas posibilidades, incluso fuera de Bégica, y al final encontraron la solución sin salir de sus fronteras. El CEO de la empresa contactó con los especialistas de Soenen Hendrik y pudo comprobar la calidad y el rendimiento de sus líneas de producción totalmente automáticas para el procesado de perfiles.
Como suelen hacer con todos los proyectos, desde Soenen Hendrik atendieron las necesidades y requisitos de Lammertyn para diseñar la solución que más se adecuara a sus deseos. “Nuestros ingenieros desarrollaron una línea de producción que reconoce los perfiles de aluminio para realizar a continuación, de forma totalmente automática, las operaciones necesarias: corte, fresado, taladrado, roscado, etiquetado, autorretestado y clasificación automática. La nueva línea de producción automática puede trabajar, incluso sin operarios, los perfiles más diversos para la fabricación de barandillas y cualquier otro elemento que sea precisa”, explica Christopher Verriest, representante de Ventas de Soenen Hendrik en España. “Nuestros sistemas —añade— se basan en un concepto básico, pero para nosotros cada cliente y su proyecto son únicos. El cliente recibe una solución a medida, perfectamente adaptada a sus necesidades y requisitos. En Lammertyn, por ejemplo, se dio gran importancia al mecanizado de roscas en la cabeza del perfil y a las soluciones para la producción totalmente automática de base de soporte con operaciones específicas”.
Trabajo autónomo, incluso fuera de jornada laboral
La línea de producción de Soenen Hendrik se controla por completo mediante un software de código abierto y se monitoriza por medio de cámaras. Por ejemplo, en el caso de que una herramienta no cumpla con los mecanizados prefijados o se produzca una rotura, la operación es asumida automáticamente por otras herramientas disponibles, evitando de esta manera cualquier tiempo de inactividad de la máquina. Estas características permiten que las máquinas inteligentes de la firma puedan trabajar de forma autónoma, sin supervisión de ningún operario.
“Gracias a esta solución inteligente, nuestros operarios solo tienen que colocar los perfiles en la mesa de entrada. Luego, y durante el procedimiento de mecanizados de los perfiles, se pueden trasladar a un punto diferente del proceso de fabricación para dar más eficiencia a la producción. Además, ahora podemos seguir produciendo durante horas incluso después de la jornada laboral. De esta manera, ampliamos la capacidad y aumentamos la producción, por lo que nuestra eficiencia y rendimiento son ahora significativamente mayores ”, concluye Lammertyn.
“Junto con el cliente -añade Verriest-, en Soenen Hendrik probamos por adelantado cada máquina, los productos seleccionados por el cliente y, si es necesario, todas las operaciones. Esto se hace en nuestra empresa y junto con nuestro equipo de producción. Por ejemplo, siempre tenemos un sistema listo para usar y completamente probado. Como resultado, el cliente puede comenzar casi inmediatamente la producción después de la instalación”.