Smart Security: las ventajas de un hogar conectado

Según datos oficiales, el mercado global del smart home (hogares inteligentes) continuará su crecimiento en los próximos cinco años a un ritmo del 6,8% hasta alcanzar los 102.961 millones de euros en 2027, según la firma de investigación de mercados Valuates. En España, se espera un crecimiento en el mercado de las soluciones y dispositivos conectados en el hogar de hasta un 300% para el año 2024.

Con la innovación y la tecnología como sus principales pilares, los sistemas de Smart Security o seguridad inteligentes se convierten en los verdaderos canalizadores del impulso para el hogar conectado. Se trata de tecnologías que facilitan el sistema de vigilancia, así como de la gestión y el control del hogar gracias a la automatización de procesos que permiten crear reglas, escenarios, el control de forma remota, la transmisión HD en vivo, establecer horarios inteligentes y sistemas de geo-servicios, entre otros. Y es que la automatización del hogar tiene muchos beneficios, brindando al usuario mayores niveles de comodidad, sostenibilidad, ahorros y eficiencia energéticos, así como más control sobre lo que ocurre en el hogar y la seguridad del domicilio.

Pero todos estos avances innovadores pierden su potencial si detrás de todos ellos no se sitúa el factor humano, un equipo de profesionales cualificados y expertos que brinden al usuario la posibilidad de disfrutar verdaderamente de toda esta inteligencia para el hogar. Es por esto que cobra una especial relevancia contar con una conexión a una Central Receptora de Alarmas, ya que dotadas de las últimas tecnologías, las CRA son un valor añadido a la experiencia del usuario, que ahora multiplica sus posibilidades gracias a los nuevos sistemas de seguridad inteligente. En otras palabras, la automatización del hogar permitirá al usuario crear tareas y monitorizar su hogar de forma remota (a través de su móvil, por ejemplo) pero a su vez, podrá contar con la tranquilidad de que la CRA hará por él, aquellas cuestiones que escapan a la automatización de tareas.

Supongamos, por ejemplo, que ocurre una inundación inesperada (cañería rota, un problema con la caldera...) mientras el usuario se encuentra fuera de casa. La CRA podrá recoger ese evento automáticamente y pasar a la acción para dar aviso personalizado al usuario de la nueva incidencia, para poder resolverlo a distancia, sin necesidad de encontrarse el problema una vez haya vuelto a casa. Y del mismo modo ocurre con la vigilancia y seguridad: la Central Receptora de Alarmas permite llamar a la policía en caso de intrusión o velar por el hogar durante la noche, momento en el que el usuario está descansando.

Y es que la seguridad es uno de los principales impulsores para la implantación de los hogares inteligentes en España. Así lo confirman los datos, ya que las cámaras de seguridad, los detectores de movimiento y la apertura y cierre remoto de puertas son las prioridades del 82% de españoles que se plantean instalar dispositivos para el hogar inteligente en los próximos dos años, según la última encuesta realizada por ADT. Y aunque la automatización sea eficiente y las tareas se creen de manera correcta, pueden ocurrir imprevistos como un corte de luz o la necesidad de llamar a la policía en caso de intrusión. Y es en este momento, en el que el papel de la Central Receptora de Alarmas es decisivo, acompañando al cliente en aquellos momentos que “escapan” a la automatización.

La automatización del hogar y la seguridad van de la mano, especialmente en el actual desarrollo de soluciones de protección y gestión del hogar inteligente como el nuevo ADT Smart Security, nuestro último lanzamiento, que permite al usuario contar con la tranquilidad de su hogar protegido, mientras disfruta de los beneficios de un hogar digital y realmente conectado. Estableciendo acciones y automatizaciones, los dispositivos conectados permitirán crear tareas propias de automatización, conocidas como ‘reglas’ o ‘rutinas’.

Imaginemos que tocan al timbre y podemos atender a quien llame a la puerta desde nuestro dispositivo móvil, monitorizando en remoto en todo el momento. O imaginemos poder contar con imágenes HD de nuestro hogar a cualquier hora, especialmente cuando tenemos pequeños o personas mayores a cargo, por ejemplo. En este sentido, las posibilidades son infinitas.

Y es que además de la protección del hogar, la automatización permite utilizar tecnologías inteligentes para la realización de tareas domésticas manuales: desde las luces de casa que se encienden cuando el automóvil se aparca en el domicilio por la noche, hasta conectar la alarma cuando el usuario abandona su hogar, siempre que cuente con los dispositivos inteligentes adecuados para ejecutar estas funciones. La automatización del hogar es cada vez más y más popular, y muchas casas cuentan ya con diferentes asistentes de voz o iluminación inteligente.

En un mercado cambiante, el usuario ya no se conforma simplemente con tener un hogar protegido: hoy busca un hogar realmente conectado. Y lo que necesitamos para habilitar el verdadero potencial de un hogar inteligente, es contar con una buena red de WiFi que abarque toda la vivienda.

La tecnología del smart home definitivamente no es tan complicada como puede parecer a primera vista, siempre que se cuente con los proveedores y profesionales adecuados.