Gandiablasco 1941-2016, 75 años después
La búsqueda de la calidad, la originalidad y la constancia de mantener un espíritu libre son el denominador común de las tres generaciones que han creado y desarrollado la empresa GANDIABLASCO.
¿De qué sirve haber llegado a un centenar de países, tener showrooms repartidos por el globo si cuando te miras al espejo no sabes de dónde vienes? GANDIABLASCO se reinventó tras una andadura de cuatro décadas (de principios de los 40 hasta finales de los 80) en la fabricación y exportación de mantas de calidad al diseño contemporáneo; en ese momento fue una apuesta de alto riesgo.
Fiel a su origen, creó líneas de textiles para el hogar, incorporando el diseño de alfombras a través de la marca GAN. El énfasis lo puso en la búsqueda de un lenguaje nuevo y personal mediante el buen diseño.
A mediados de los 90 la empresa GANDIABLASCO debutó por sorpresa en el ámbito del mobiliario de exterior con Na Xemena, una pequeña colección que dejó estupefactos a todos. ¡Nadie la entendió! Pero era cuestión de insistir, insistir
Estos hechos dieron un vuelco al destino de la empresa: piezas que han marcado un hito en el hábitat, alfombras que han roto clichés, muebles que han borrado la línea divisoria entre interior y exterior.
El edificio sede de GANDIABLASCO habla de eso, de expresar los valores mediante la arquitectura. Pero sobre todo habla de la capacidad de detectar esos valores, recuperarlos y potenciarlos. No basta con mirar, hay que saber ver. Y actuar bien.
“An Odyssey GANDIABLASCO Back to the islands”, es el nuevo catálogo de mobiliario de exterior que te invita a un viaje a través de las colecciones, un repaso a fondo de una pieza a otra, así hasta dar con la chaise-longue más cómoda del catálogo. Así, extenuados por el largo trayecto, nos tumbaríamos bajo un pino a orillas del Mediterráneo para sentir en la piel la quintaesencia de la empresa.
75 años después, el viaje de vuelta a Ca Na Xemena representa la cultura estética, conceptual y espiritual de GANDIABLASCO, dejando en el aire reminiscencias del origen, la brisa de un mar atávico cuna de civilizaciones. Una manera personal de entender la mediterraneidad, la comunión con la Naturaleza, la sensorialidad, la luz y un cierto misticismo. Aunque la colección Na Xemena de GANDIABLASCO se puede leer como una fábula con lección:
“Sigue tu instinto, hazle caso a tu intuición, cree en tus propios sueños, ellos te guiarán mejor que ninguna brújula. ¿Te ríes? Podemos vivir sin muebles, incluso sin casa. Pero no sin sueños.”
Matilde Oriola, escritora y periodista
Fuente: GandiaBlasco
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