Vigo alberga el primer edificio de viviendas de Galicia con certificación Passivhaus

El 23 de julio se celebró en el Club Financiero de Vigo la charla coloquio ´El primer edificio pasivo de Vigo´, en la que se presentó Colón 11, el primer edificio de viviendas de Galicia que cuenta con certificación Passivhaus. En el transcurso del acto, en el que participaron el arquitecto del proyecto Leonardo Llamas y el presidente de la Plataforma de Edificación Passivhaus, Bruno Gutiérrez, se hizo entrega de la placa que confirma esta calificación para Colón 11.

Colón 11 es un edificio lleno de historia y de historias. No en vano albergó durante muchos años el Hotel Galicia, con cientos de miles de visitantes a lo largo de sus más de cincuenta años de vida. Su estructura, muy estrecha, definió el nuevo proyecto, realizado por el arquitecto Leonardo Llamas, de Edifico Arquitectura y construido por San José. “El edificio Colón 11 se presentó como un reto desde el principio, tanto por la geometría existente como por la responsabilidad de rehabilitar un edificio emblemático del centro como lo era el Hotel Galicia. Conseguir la primera certificación de Galicia Passivhaus Classic en un plurifamiliar fue una satisfacción, lo que demuestra también en qué situación se encuentra esta ciudad con respecto a los edificios eficientes. He de decir que elegir esta certificación no fue una opción, ya que queríamos conseguir que esta ciudad, a la que le tenemos tanto cariño, se convirtiera en el que probablemente sea el edificio de vivienda colectiva más eficiente de la comunidad”, explica Leonardo Llamas.

El inmueble cuenta con siete viviendas de lujo, una por planta y un tríplex de más de 350 metros cuadrados, con una terraza panorámica. Todas ellas disponen de aparcamiento semiautomático en la planta baja y bodega, en el sótano. En las viviendas destaca la división entre la zona de día y la de noche, aprovechando la luz natural de la fachada principal para la primera, mientras que la zona de noche está separada por un patio interior. En el diseño de todo el conjunto conviven a la perfección hormigón y madera, para ofrecer un edificio moderno, elegante e innovador en pleno centro de Vigo, a un paso de todos los servicios y a escasos 50 metros del puerto deportivo. Sin duda, unas viviendas de lujo y diseño, pero no es eso lo más importante. La principal característica de Colón 11 es su respeto con el medio ambiente y con la salud, por lo que sus propietarios podrán disfrutar de un aire puro y renovado las 24 horas del día, gracias a su sistema de ventilación y con un consumo energético casi inexistente.

“Las viviendas en las que pasamos la mayor parte de nuestro tiempo no están bien construidas, no podemos disfrutar en ellas con una calidad de aire interior óptima y pierden gran cantidad de energía. Por ello, es fundamental acometer rehabilitaciones que permitan niveles adecuados de aislamiento térmico y evitar filtraciones de aire incontroladas que repercuten en el consumo energético. La rehabilitación de Colón 11 es una muestra más del compromiso de la ciudad de Vigo con la construcción energéticamente eficiente que, sin duda, repercute en el bienestar de los ciudadanos y del medio ambiente” comenta Bruno Gutiérrez Cuevas.

El edificio de viviendas rehabilitado en la calle Colón 11, con una superficie útil construida de 1.158 m², cuenta con la certificación Passivhaus Classic. Al tratarse de una rehabilitación hubo que cuidar mucho los detalles de los forjados entre viviendas y medianeras. Para evitar puentes térmicos y realizar el sombreamiento en las fachadas también se tuvo que prestar especial atención en la ventilada como en la de SATE.

Conseguir la certificación fue todo un reto ya que se partía de un edificio entre medianeras con protección estructural. Por ello, se realizó un refuerzo muy delicado en la estructura, lo que conllevó un especial cuidado en todos los detalles de la hermeticidad.

A la hora de rehabilitar se tuvo en cuenta en todo momento la estética del entorno de la parte baja de la calle Colón que marca claramente el diseño de la propia entrada y distribución de las viviendas. Al haber una vivienda por planta se distribuyeron en zona de día y noche con una distribución longitudinal en la que cada habitación tiene su propio baño y vestidor.

Antes de realizarse la rehabilitación había cierto miedo por parte del promotor a que se influyera en la estética del edificio, sin embargo, la realidad es que una rehabilitación Passivhaus es totalmente compatible con respetar la estética asegurando una calidad del aire interior muy superior a cualquier edificación.

A partir de ahora el gasto energético del edificio se verá significativamente reducido contando con una demanda de calefacción anual de 13.0 kWh/(m² a); carga de calefacción 9.0 W/m²; demanda de refrigeración anual 5.0 kWh/(m² a); carga de refrigeración 6.0 W/m² y demanda total de energía primaria 95.0 kW/ (m² a).