Techos Armstrong para la mejor acústica en oficinas
El confort acústico es una de las características más importantes para conseguir que una oficina sea apta para el trabajo. Una oficina acústicamente acondicionada aporta una gran serie de beneficios: facilita la capacidad de concentración y la comprensión de diálogos, y se reducen los niveles de estrés y de adrenalina, mejorando así la eficiencia y el rendimiento de los trabajadores. En general, un entorno bien adaptado acústicamente mejora notablemente la calidad de vida en el trabajo.
En los últimos años la idea de la oficina con despachos individuales ha quedado desfasada, y se estila cada vez más el modelo open space como sitio de trabajo. En este último modelo es más complicado cumplir con todos los objetivos para convertirlo en un lugar acústicamente limpio.
Para asegurarse de que la oficina está bien adaptada a nivel acústico es necesario elegir minuciosamente los materiales que se van a emplear para lograr ese objetivo. Las dos características más importantes a la hora de elegir un producto son la atenuación y la absorción acústica. Esto asegura una buena barrera frente al ruido y, a su vez, se evita que ese mismo ruido rebote.
Hay no obstante otros factores determinantes para un óptimo nivel de confort acústico en espacios de oficinas como el coeficiente de reducción del ruido -que indica la categoría de la absorción acústica de un material- o el índice de reducción acústica, importante para asegurar la privacidad en despachos individuales.
Armstrong cuenta con una serie de modelos que aseguran las máximas ventajas desde un punto de vista acústico para todo tipo de oficinas. Tanto el modelo de techo Perla dB como Sahara dB, cuentan con un excelente nivel de reducción del sonido, evitando la necesidad de instalar más barreras acústicas en espacios cerrados. Ambos productos cuentan con una absorción acústica de hasta aw: 0,60 (H) y una atenuación acústica de hasta 43 decibelios. Además cuentan con un alto nivel de reflexión de la luz.
Los techos Ultima+ dB, de superficie lisa y muy duradera, ofrece unos niveles más elevados de atenuación acústica (hasta 43 decibelios) para aumentar aún más la privacidad entre espacios adyacentes en oficinas, convirtiéndolo en una solución perfecta para despachos y oficinas individuales. A parte de tener unos buenos niveles de absorción acústica, también cuenta con un coeficiente de reducción del ruido de 0,60.