Producción de muebles de Duravit en Schenkenzell: tecnología moderna y oficio artesanal de tradición
200 años de experiencia de Duravit y 40 años en la fabricación de muebles abalan a la compañía, primero en Hornberg y desde 1992 en la fábrica de muebles de Schenkenzell. Aunque muchos de los procesos se encuentran automatizados gracias a una moderna maquinaria y a unas instalaciones inteligentes, la perfección tan sólo se alcanza en combinación con el arte y el oficio de los empleados: sus conocimientos y su experiencia posibilitan un desarrollo propio e innovador, que tiene como claro ejemplo el desarrollo de la tecnología c-bounded.
Industria y oficio
Los resultados de los procesos industriales en la fabricación se encuentran optimizados, son altamente flexibles y van siempre en paralelo con la actividad artesanal del personal, formado prácticamente en su totalidad por carpinteros o ebanistas. Tan sólo mediante esta combinación se puede garantizar la máxima calidad que marca los estándares de Duravit.
El punto de partida del complejo proceso de fabricación se encuentra en un almacén de planchas de madera automatizado en el que se almacena la materia prima mediante un sistema informático.
En el control de fabricación se agrupan los pedidos de los clientes según el tipo de material, de modo que se logra una producción eficiente y el menor desecho de madera posible. En la prefabricación y con ayuda de los planos de recorte resultantes, se elabora la distribución de las planchas en las instalaciones de recorte. Después, en la cadena de producción se le aplica el formato y los cantos a los componentes. Dependiendo de estos últimos, las siguientes estaciones son los puestos de procesamiento: el agujereado, el serrado y la colocación de cantos encolados, hasta completar todos los pasos del proceso.
Una parte de los componentes se desvían al taller de pintura donde son lijados, lacados y finalmente pulidos. El montaje final se realiza sobre pedido en varios pasos: en los puestos de montaje o líneas de montaje se realizan los agujeros precisos para la construcción, se colocan las bisagras y se montan los cajones para que al final el mueble acabado pueda superar el control de calidad y ser embalado.
En el caso de las encimeras, soluciones c-bonded y f-bonded, en conos Starck así como en espejos y muebles-espejo que dependen de la mano del artesano, se montan en un proceso de trabajo completo en los puestos de montaje.
Diseño y tecnología
El constante lenguaje de diseño de Duravit va mucho más allá de los productos de baño por separado. El proceso de desarrollo de la cerámica, muebles de baño y bañeras van en paralelo y se integran en un diseño global. El personal que gestiona el producto y el desarrollo trabaja junto a diseñadores externos para innovar y elaborar lastendencias del mañana. Como resultado de estos procesos surgen retos completamente nuevos, tales como la tecnología c-bonded, única en el mundo y que en un proceso singular combina la cerámica y el mueble casi sin que exista junta.
La base para desarrollar estas novedades complejas son la experiencia acumulada durante muchos años y un profundo conocimiento del producto. El programa demuebles de baño de Duravit incluye un total de siete programas que coinciden en sus diseños con una serie específica de baño y otras seis que pueden combinarse de forma flexible con diferentes series de cerámica. Generalmente los muebles se fabrican bajo pedido y en función de los deseos del cliente. Los 46 acabados en decorados diferentes, madera auténtica o lacado dan como resultado infinitas posibilidades en el producto final.
Calidad y sostenibilidad
Duravit otorga mucha importancia a la calidad en la selección de los materiales utilizados: los proveedores de paneles laminados, chapa de madera auténtica, laca, cantos ABS, bisagras e iluminación se seleccionan de forma exhaustiva y colaboran con Duravit desde hace muchos años.
Cada pieza de mobiliario se somete a una comprobación de calidad del 100 % que incluye funcionalidad, elaboración y acabado.
Durante el proceso de desarrollo se realizan exhaustivas comprobaciones en una cámara de clima propia de la empresa que garantiza que, tanto el mueble como el material resisten condiciones extremas, como es el caso de una elevada humedad relativa, o de altas temperaturas.
La fábrica de Schenkenzell cumple con los estándares más actuales en relación al compromiso medioambiental y a la eficiencia energética. Para este fin Duravit ha invertido en los sistemas más modernos que dan prioridad a la instalación de calefacción, la recuperación de los desechos de madera, a un sistema de absorción y de filtraje optimizado según necesidad y a una instalación de lacado.
El nuevo concepto de iluminación LED presenta un balance energético excepcional con un control inteligente. El consumo eléctrico se ha podido disminuir en un 10%. Además, tan solo se utilizan maderas certificadas con PEFC o lacas que lleven el sello ambiental del ‘Blaue Engel’ (ángel azul).