Entrevista a Vicente Alcaina, fundador de Iber Samop
Iber Samop es la empresa española de referencia en servicios integrales de fresado, microfresado y barrido, con transporte propio y una experiencia de más de 40 años. Aprovechamos la presencia en el II Salón de Máquinas de Carreteras y Obras de su fundador, Vicente Alcaina, para analizar la situación de la compañía y profundizar en las ventajas que ofrece la nueva versión de su barredora patentada de alta producción Barrop.
Por el interés que está despertando entre los asistentes al Salón, es evidente que uno de los productos destacados de este encuentro está siendo su nueva barredora de alta producción. ¿Qué destacaría de este producto?
Se trata de la barredora con el mayor diámetro de cepillo del mercado mundial (80 cm), con una durabilidad entre 6 y 8 veces mayor que las versiones de polipropileno (incorpora 4.000 puntos de fricción contra el suelo y es capaz de barrer hasta 25 cm).
El equipo de barrido está constituido por sirgas de cable de acero de alta resistencia, con cintas finales que se transforman en minibarredoras al rozar el suelo. Ofrece una alta eficiencia ya que en una sola pasada puede hacer el trabajo para el que otras máquinas necesitarían dos o tres.
Además, en el diseño de esta versión, hemos tenido muy en cuenta la facilidad de mantenimiento, permitiendo al usuario cambiar el material de desgaste siguiendo unos simples pasos.
Nuestra barredora está patentada y a partir de ahora será comercializada con la marca Barrop (Barredoras de Obras Públicas).
¿Puede emplearse esta barredora en cualquier tipo de máquina portadora?
Su nuevo sistema de enganche facilita su acople a las minicargadoras Bobcat, así como al 90% del resto de marcas de maquinaria del mercado. Con tres latiguillos hidráulicos la barredora queda perfectamente adaptada a la máquina portadora, la cual puede volver a cambiar de forma sencilla este implemento por la cuchara.
¿Qué anchura de barrido ofrecen con esta nueva versión de barredora?
La anchura estándar es de 1,50 metros, aunque se pueden hacer versiones más grandes (para mixtas, por ejemplo) y más pequeñas (no es aconsejable esto último).
Por lo que he podido ver, ésta es ya la quinta versión de su barredora. ¿Cuántos años de experiencia acumulan en el desarrollo de estos productos?
Efectivamente, ésta es la quinta versión de nuestra barredora y en ella hemos concentrado la larga experiencia que atesoramos en el ámbito del barrido. Por ejemplo, en este nuevo modelo hemos incorporado como novedad una plancha realizada con material de alto límite elástico, que a pesar de ser más fina que la empleada previamente, nos ofrece una mayor resistencia.
De todas formas, nuestras barredoras se han caracterizado tradicionalmente por ofrecer una gran durabilidad. Por ejemplo, esa unidad que puede ver en la foto que tenemos en el stand, tiene más de 15 años y ha sido reconstruida.
Un mismo cepillo, trabajando todos los días en el fresado, puede durar perfectamente tres meses sin tener que cambiarlo (Iber Samop vende el recambio para hacer el mantenimiento y también ofrece a los clientes la posibilidad de realizarlo en sus talleres).
¿Está ya en fase de comercialización esta nueva versión de la barredora Barrop?
Efectivamente, la que mostramos en el stand es la primera unidad que hemos desarrollado de la Serie 5 y desde este mes de julio estamos en condiciones de comercializarla.
Cambiando de tercio, ¿cómo definiría la situación que atraviesa actualmente Iber Samop? ¿Notan un repunte de actividad?
Iber Samop, como todas las empresas del sector, ha padecido bastante la caída de actividad sufrida durante la crisis, pero también es cierto que en el último año la situación ha cambiado, con un repunte del trabajo.
El problema es que, tras las elecciones autonómicas y municipales, se ha vuelto a notar una caída. Esperemos, ya que estamos en manos de los políticos, que éstos se den cuenta de las necesidades que tiene este país en reparación de carreteras y que reactiven la inversión para que las empresas podamos seguir generando empleo y con ello, consumo, que es lo que el país necesita.
¿Han incorporado nueva maquinaria aprovechando el incremento de actividad del que hablaba?
Así es, durante este último año hemos comprado cinco minicargadoras Bobcat S570 y dos fresadoras Wirtgen, modelos W210i y W200i. Al igual que estuvimos 6 ó 7 años sin adquirir ningún equipo nuevo, en cuanto hemos visto que la economía mejoraba un poco, hemos apostado por renovar parte de nuestro parque de maquinaria para poder seguir ofreciendo a nuestros clientes la tecnología más avanzada.
¿Cuántos equipos conforman actualmente su parque?
Contamos con 37 fresadoras, desde la más pequeña (W35) hasta la más grande (W210), y con 42 minicargadoras Bobcat, equipadas con barrerdora o implemento de fresado.
¿Todas sus fresadoras son Wirtgen?
Hace años me encontré una novia a la que la llamaban Wirtgen y me casé con ella. De cara a nuestros clientes es la marca que más y mejor cumple con los requerimientos de producción y fiabilidad.
¿Con qué estructura cuentan para dar servicio, en cuanto a plantilla, instalaciones…?
Con el incremento de actividad llegamos a incorporar a 20 nuevos empleados, sobrepasando los 60 trabajadores en plantilla. Y en cuanto a instalaciones, mantenemos nuestra central de Museros (Valencia) y la delegación de Campo Real (Madrid). En breve tenemos previsto abrir también una base en Cataluña.
¿Han tomado alguna iniciativa en materia de internacionalización?
En este sentido, hemos hecho tres grandes incursiones, con balance dispar. En Francia hemos trabajado en alguna obra importante. En el resto de Europa, hemos acertado en unos trabajos pero también hemos fallado en otros, sobre todo en la gestión de compras. Y los resultados más negativos los hemos tenido en Sudamérica. Enviamos a Perú dos minicargadoras y dos fresadoras para intentar aprovechar la presencia en aquel país de varias constructoras españolas, pero la actividad no fue la esperada. Desde allí dimos el salto a Bolivia y apenas tuvimos tres meses de trabajo. Por tanto, cuando repuntó la actividad en España, decidimos volver a traer nuestras máquinas para dar respuesta a ese incremento de demanda.
¿Qué nivel de ocupación tienen, a día de hoy, sus máquinas?
Depende de las fechas. Hace un mes le puedo asegurar que tuvimos un nivel de ocupación del 110% (con máquinas que tenían que doblar turno, con operarios diferentes para cubrir el día y la noche). Ahora, estaremos en torno a un 75%.
De cara al futuro siguen existiendo muchas incógnitas sobre cómo evolucionará el mercado. ¿Cree que nos esperan años más positivos para el mantenimiento de carreteras?
Nuestro sector sigue sufriendo un gran problema, el retraso en los cobros. No tiene ni pies ni cabeza que el primero que no cumpla la Ley de Morosidad sea el propio Gobierno. Los empresarios no podemos seguir pagando a los 30 días salarios, Seguridad Social, combustible y todos los gastos que hay en nuestras compañías, mientras seguimos cobrando a los 210 días. Cuando se le traslada esta problemática al Gobierno, su respuesta es que lo que hay que hacer es denunciar estas prácticas.
Pero no podemos bloquear la Justicia en nuestro país con este tipo de denuncias, porque el volumen de éstas sería enorme… Y todo por no aplicar una ley que ya existe.